EFE.- El músico germano-israelí Gil Ofarim se enfrenta a cargos de acusación falsa y difamación después de que la fiscalía de Leipzig, en el este de Alemania, cerrase la investigación de un presunto caso de antisemitismo denunciado por el cantante.
La fiscalía anunció este jueves en un comunicado que cierra las diligencias contra un empleado de hotel al que Ofarim había acusado de discriminación antisemita en un caso que ocupó titulares en Alemania en octubre del año pasado.
De acuerdo con el artista, hijo del cantante israelí Abi Ofarim, el recepcionista le había conminado a quitarse un colgante con una estrella de David o de lo contrario no le permitiría registrarse en el hotel y había proferido insultos antisemitas.
El músico había denunciado el incidente en un vídeo compartido en redes sociales que le granjeó numerosas muestras de solidaridad e incluso se produjo una manifestación contra el antisemitismo delante del hotel con varios cientos de asistentes.
No obstante, una evaluación de un vídeo grabado por las cámaras de seguridad del hotel de Leipzig sembró la duda entre los investigadores, puesto que en las imágenes no podía apreciarse que Ofarim llevase un colgante a la vista.
Este jueves, la fiscalía anunció que las afirmaciones del músico «no se han visto confirmadas por el resultado de las investigaciones» y los hechos no acontecieron en la forma en que los representó.
Por el contrario, existe la «sospecha fundada» de que Ofarim realizó las acusaciones con «conocimiento» de su falta de veracidad y de las consecuencias que podían tener para el recepcionista y que, a pesar de ello, las repitió en su testimonio ante la policía.
La denuncia falsa y la difamación están castigadas con multas o con penas de hasta cinco años de prisión según el código penal alemán.