La fosa fue descubierta en el distrito de Nyarugenge, en el patio trasero de la casa de Simbizi François
ABC.- Unos cien cuerpos de víctimas del genocidio de Ruanda contra los tutsis (1994) han sido exhumados de una fosa encontrada el pasado sábado en Kigali, confirmaron hoy a Efe fuentes oficiales.
La fosa fue descubierta en el distrito de Nyarugenge, en el patio trasero de la casa de Simbizi François, acusado de colocar un control de carretera cerca de su vivienda durante el genocidio que llevó a la muerte a cientos de tutsis que vivían en esa zona.
François fue condenado por delitos de genocidio en Ruanda, donde en sólo cien días murieron más de 800.000 tutsis y hutus moderados, y falleció en prisión a comienzos de este siglo.
Ngabonziza Emmanuel, vicealcalde encargado de asuntos sociales del distrito de Nyarugenge, dijo a Efe que se espera que se hallen más cadáveres a medida que avancen las excavaciones.
Indicó que han sido detenidos familiares de Simbizi, así como un antiguo líder local.
«Hemos arrestado a la esposa de Simbizi y a sus hijos, que vivían en esa casa sabiendo bien que detrás de ellos había una fosa llena de cuerpos del genocidio de 1994 contra los tutsis. Los hemos entregado a la Fiscalía para que pueda presentar cargos contra ellos y luego sean acusados ante tribunales de justicia», afirmó el vicealcalde.
Los arrestados, acusados de ocultar información
Por su parte, «el exlíder local conocía la fosa, pero optó por pedir un soborno a la familia para guardar silencio», señaló Emmanuel, al añadir que probablemente los arrestados serán acusados de conspirar para ocultar información sobre el genocidio.
Según el Gobierno ruandés, la negativa de los autores del genocidio a revelar dónde sepultaron a las víctimas ha obstaculizado los esfuerzos para ofrecerles un entierro digno y lograr la reconciliación con los supervivientes.
En enero pasado, las autoridades exhumaron 141 cuerpos de tutsis atacados como parte de la campaña contra ese grupo étnico antes del genocidio en el distrito de Rubavu, en la frontera con la República Democrática del Congo (RDC).
En abril de 2018, más de 2.000 cuerpos descubiertos en fosas comunes en Kabuga, en las afueras de la Kigali, también fueron exhumados.
El 6 de abril de 1994, los entonces presidentes de Ruanda, Juvénal Habyarimana, y Burundi, Cyprien Ntaryamira, ambos hutus, murieron al ser derribado el avión en el que viajaban, lo que desencadenó el genocidio, una de las peores matanzas étnicas de la historia reciente de la humanidad.
Ese horror fue la culminación de décadas de odio entre la mayoría hutu y la minoría tutsi, infundido por los colonos belgas, que dividieron a la población etiquetándola en estas etnias y favoreciendo a los últimos para discriminar a los primeros.