Los abogados Ricardo Chamorro y Juan José Aizcorbe, que en el pasado estuvieron en otras listas de la extrema derecha, ocuparán escaños en el Congreso. También hay varios militares retirados, abogados y empresarios
DANILO ALBÍN. PÚBLICO.- Un grupo de ovejitas blancas pateando a una ovejita negra. Debajo, un lema contundente: “compórtate o lárgate”. Se lo decían, claro está, a la oveja de color negro. La frase y el cartel corresponden a Democracia Nacional, un partido xenófobo con escasa implantación electoral en España. Uno de sus ex candidatos, Ricardo Chamorro, acaba de cantar victoria: este domingo ha sido elegido diputado por Ciudad Real en la lista de Vox, la primera opción de extrema derecha que consigue logros en las urnas.
Chamorro ha sido un hombre inquieto dentro del mundo “patriota”, término empleado por los ultras para referirse al campo anecdótico en el que se movía la ultraderecha. Antes de que Vox apareciera en escena, este abogado fue candidato por Democracia Nacional en las elecciones europeas de 1999. El partido, que llegó a tener cierto protagonismo en el entorno de la derecha más radical, había sido creado cuatro años antes por el neonazi Manuel Canduela.
Chamorro saltó posteriormente a España 2000, el grupo xenófobo que impulsó el ultraderechista valenciano José Luis Roberto, conocido además por su vinculación al mundo de los clubes de alterne. En las elecciones generales de 2000, Chamorro aparecía en la lista de esta formación. Los resultados obtenidos fueron muy pobres: apenas lograron 9.562 votos (0,04%).
Tampoco tuvo suerte cuando se acercó a Unión del Pueblo Navarro (UPN), formación regionalista conservadora que le fichó como suplente para la lista municipal en Altsasu allá por 2003. Chamorro, quien anoche confirmó que su futuro a corto plazo estará en el Congreso, es actualmente el delegado de la Fundación DENAES –creada por Abascal– en Ciudad Real.
De Fuerza Nueva a Vox
Este abogado no es el único ex militante de la extrema derecha que ahora toca el cielo con las manos. El número dos por Barcelona, Juan José Aizcorbe Torra, solo comparte con el independentismo catalán su segundo apellido. Este abogado y ahora concejal de Vox en el ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón es un acérrimo nacionalista español con larga trayectoria: en 1982 se presentó en las listas de Fuerza Nueva a las elecciones generales de ese año (iba como número cuatro).
En 1989 probó suerte con el Frente Nacional (FN), la candidatura impulsada por Blas Piñar para tratar de acceder al Parlamento Europeo. La plancha de FN obtuvo 60.672 votos, equivalentes al 0.32%. Su trayectoria política, siempre marcada por la irrelevancia, continuó en el Partido Demócrata Español, una escisión del PP que, a diferencia de lo que ocurriría con Vox, no tuvo el más mínimo éxito. Se desintegró en 2008.
A nivel profesional, entre sus clientes figuran los familiares del dictador Francisco Franco, a quienes representó en un pleito con el ayuntamiento de Santiago de Compostela por unas estatuas. El pasado 24 de octubre, cuando se concretó la exhumación de Franco, el ahora diputado de Vox mostró su malestar en las redes sociales.
Militares, abogados…
Chamorro y Aizcorbe compartirán grupo con otros 50 miembros de Vox entre los que se encuentran al menos seis militares en la reserva o ya retirados –algunos de los cuales ya fueron elegidos diputados en abril pasado–, cerca de una decena de abogados y alrededor de media docena de profesionales vinculados al mundo empresarial, además de algunos familiares de víctimas de ETA, como Francisco José Alcaraz –cuyo hermano y dos sobrinas murieron en un atentado contra la casa cuartel de Zaragoza en 1987– o Antonio Salvá, padre del guardia civil Diego Salvá, asesinado en 2009.
Entre los diputados con pasado militar se encuentra Manuel Mestre, quien llegó a estar al frente del mando de las fuerzas conjuntas de la OTAN en Lisboa, o el general del Ejército de Tierra Alberto Asarta, quien fue condecorado –entre otras medallas– con la Gran Cruz al Mérito Militar por su papel en Irak –dirigió a las tropas españolas en la denominada “Batalla de Nayaf” en 2004–. En abril pasado ocupó el primer puesto de la lista de Vox por Castellón. Entonces quedó fuera del Congreso. Ahora, en cambio, recogerá su acta de diputado
