Los ultras de Excursionistas empañan la celebración del primer clásico del barrio en Primera ante Defensores de Belgrano, pese a que las locales lograron remontar el partido
LAURA GONZÁLEZ. EL COMERCIO.- Lo que parecía una jornada histórica en el fútbol femenino en Argentina se convirtió en la tarde de este domingo en una auténtica pesadilla para las jugadoras que protagonizaron el derbi entre Excursionistas y Defensoras de Belgrano, el primero en la máxima categoría de los dos conjuntos del barrio de Bajo Belgrano, en la ciudad de Buenos Aires. Los encargados de empañar la fiesta deportiva fueron los ultras locales, la ‘barra’ de Excursionistas, con mil y un delitos a sus espaldas, quienes atemorizaron a las futbolistas visitantes e incluso a las locales, además de a la colegiada del partido.
Desde el lugar que ocupaban en el graderío no dejaron de escucharse lamentables insultos machistas desde el comienzo del encuentro, acompañados por una lluvia de escupitajos que alcanzaron a algunas de las jugadoras rivales, como la delantera Antonella Tatulli, que denunció la situación una vez terminado el partido. «No se hizo nada para que todo eso se frenara. ‘Hija de puta’ es lo menor que me dijeron, y me lo chillaron 850.000 veces. La tribuna fue completa y absolutamente una vergüenza«, afirmaba a los encargados de la retransmisión del partido, exigiendo »disculpas sinceras« por parte de Excursionistas, »a todo el maltrato que hemos sufrido el día de hoy«.
«No se hizo nada para que se frenara. ‘Hija de puta’ es lo menor que me dijeron, y me lo chillaron 850 mil veces»
El tenso ambiente que se vivió desde el arranque se acrecentó después de que las visitantes marcaran los dos primeros goles del partido, abriendo la lata cuando apenas habían transcurrido 11 minutos de juego. En el ’33 la zaguera de Defensoras de Belgrano Cecilia Acevedo fue expulsada, y ahí empezó a cambiar todo, ya que en menos de diez minutos las ‘verdes’ consiguieron darle la vuelta al marcador. 3-2. Un triunfo que les aleja además de la zona baja de la tabla.
Saqueo y temor
Una remontada que sin embargo no apaciguó los ánimos. La ‘barra’ de Excursionistas decidió que aún no había sido suficiente y saltó al campo, colándose como si nada en el vestuario local. Allí, según explican, hubo más que palabras, con serias amenazas y varias jugadoras llorando sin parar atemorizadas. Y eso no fue todo ya que un grupo de estos ultras se dirigió a los dirigentes del club para exigirles la indumentaria de sus jugadoras, en una más que posible actitud machista. Finalmente se hicieron con ella, robándoles sus camisetas, medias y pantalones. Todo ello, bajo la mirada de las fuerzas de seguridad, que no impidieron este saqueo.
Un escándalo que ha sido muy criticado en las redes sociales, entre ellas por Maca Sánchez, jugadora de San Lorenzo, quien impulsó el profesionalismo en el fútbol femenino en Argentina. «Repudio total a lo que pasó. La barra apretando y amenazando a dirigentes y jugadoras para llevarse las camisetas. Y lo consiguieron mientras la policía observaba«. Fla Joannaz, exjugadora de Excursionistas, también quiso mostrar su malestar por lo ocurrido. »Que vengan de a uno a decirme lo que quieran. Hipócritas que avalan que sucedan esas cosas dentro de su propia cancha«.
Un grupo de radicales que convirtió las lágrimas de felicidad de las jugadoras nada más consumarse la victoria, la primera del clásico femenino de Buenos Aires, en otras más profundas de rabia e indignación. «Es una desgracia pero consiguieron lo que querían, igualdad. Es exactamente lo mismo que sufren los hombres (con la barra). Acostúmbrense, bienvenidas al profesionalismo del fútbol en Argentina«, han afirmado resignados varios aficionados.
