Sport.- El delantero del Wolfsburgo Kevin Behrens ha sido el protagonista de un episodio homófobo en la Bundesliga. El jugador alemán se negó a firmar una camiseta especial del equipo con motivos LGTBI durante una sesión de firmas con aficionados.
Behrens se negó en reiteradas ocasiones a firmar la prenda y reiteró su negativa con una frase ofensiva que no ha pasado desapercibida: “No firmaré ese tipo de mierda gay», dijo el ariete. El acto tuvo lugar el pasado mes de septiembre durante un acto benéfico en el que otros futbolistas firmaron diferentes productos. En ese acto un aficionado se acercó a Behrens con una camiseta que el Wolfsburgo lanzó hace cinco años para mostrar el «apoyo a la diversidad» del club. La prenda tiene representada la bandera irisada, símbolo del colectivo LGBTI, en varias partes, entre ellas el dorsal y el futbolista no quiso estampar su autógrafo al verla.
Después de discutir el incidente el Wolfsburg tomó medidas y ha suspendido al jugador: “Durante una reunión interna se hicieron declaraciones que no estaban en línea con la postura del VfL Wolfsburg. El incidente fue inmediatamente tratado internamente», explicó el club en un comunicado. «El VfL Wolfsburg subraya que es consciente de su responsabilidad social. El club y sus empleados defienden la diversidad y la tolerancia, y los valores fundamentales como el respeto, la honestidad y la apertura siempre han estado firmemente anclados en la filosofía del club», zanja.
El director deportivo del conjunto alemán Sebastian Schindzielorz fue tajante al respecto: «La homofobia no tiene cabida entre nosotros, Kevin ahora está en casa».
Disculpas públicas
Por su parte, Behrens tuvo que pedir disculpas por su reacción. «Mis comentarios espontáneos no estaban en absoluto bien. Me gustaría disculparme por eso», afirmó y añadió que «el tema se discutió internamente y les pido que comprendan que no deseo hacer más comentarios al respecto”.
El delantero, que cumple contrato a final de temporada, apenas ha tenido minutos en este inicio de curso. Pese al incidente, estuvo en la convocatoria del duelo de la última jornada contra el Bochum, aunque no llegó a jugar.