La teniente Quinteros Giménez pidió que la exoneraran de las guardias de 24 horas para que pudiera alimentar a su hijo
La teniente de fragata Quinteros Giménez, de 33 años, nunca tuvo ninguna falta en toda su carrera –fue la mejor graduada de su promoción–, pero ni su intachable currículum ni el amparo de la Constitución paraguaya la han salvado de tener que cumplir una condena de 46 días privada de libertad (en arresto domiciliario) por querer amamantar a su hijo.
Tras dar a luz a su bebé, hace tres años, y volver de su baja por maternidad de seis meses, la militar pidió que la exoneraran de las guardias de 24 horas cada tres días que el servicio le exigía para poder ir a casa a alimentar al niño. La petición fue rechazada tanto por sus superiores como por la Justicia militar.
La uniformada se vio obligada a recurrir a la justicia civil, apelando al derecho del niño a recibir su alimento y una ley que vela por la maternidad en Paraguay. El reclamo le costó un sumario en su contra por “calumnia y faltas contra la disciplina militar”.
Su caso se dio a conocer en 2017, cuando llegó a discutirse en el Congreso y movilizó a grupos feministas. Los militares llevaron a cabo una campaña mediática de desprestigio de la mujer, a la que acusaban de mentir mientras se evidenciaba el pulso entre la justicia militar y la civil en un país con la dictadura militar más larga de Latinoamerica a sus espaldas, liderada por el comandante Alfredo Stroessner de 1954 a 1989.
Finalmente, la ley castrense se ha impuesto. Según publicó el periódico paraguayo Hoy , la Corte Suprema de Paraguay ratificó la semana pasada el fallo que la Corte Suprema de Justicia Militar había dictado en 2017 y la teniente deberá permanecer un mes y medio encerrada en casa.
La condena, que el abogado de Quintana recurrirá a la Comisión Interamericana de Derechos Humano, ha recibido muestras de solidaridad por parte de representantes políticos y partidos. Por su parte, la ministra de la Mujer del país, Nilda Romero, anunció el lunes que pedirá a las Fuerzas Armadas que no se aplique la sanción contra la teniente de fragata.
El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, ha dicho que no puede “ir contra la ley”, después de recibir peticiones para que intercediera en calidad de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas.
