EFE. ELDIARIO.ES.- El rey ha afirmado este miércoles que los derechos humanos requieren de «una atención, una dedicación y una protección permanentes» al no ser suficiente solo su reconocimiento y ha animado a superar «las discriminaciones y las exclusiones en democracia» para construir un mundo más justo.
Felipe VI ha presidido el acto de entrega del VIII Premio Derechos Humanos Rey de España, que este año ha recaído en la Asociación Colaboración y Esfuerzo (Acoes), una ONG hondureña que desarrolla proyectos para personas desfavorecidas y en riesgo de exclusión.
La ceremonia ha tenido lugar en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), institución que, junto a la del Defensor del Pueblo, convoca el premio cada dos años para reconocer la labor de entidades públicas o privadas iberoamericanas en favor de los derechos humanos y los valores democráticos.
El rey ha subrayado que el galardón, dotado con 25.000 euros, busca dar «un constante desarrollo y un cada vez más efectivo cumplimiento» a los principios que recoge la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 con el fin de lograr su plena realización.
En opinión del jefe del Estado, el reconocimiento y la conquista de esos derechos «no se agotan en sí mismos» y es preciso reafirmar «su plena vigencia y su validez de alcance universal».
«Precisan de una atención, una dedicación y una protección permanentes, pues implican una afirmación inapelable de la dignidad de todas las personas, independientemente de su condición, de su origine o de sus particulares circunstancias», ha afirmado el rey.
El monarca ha pedido a las instituciones y a la sociedad civil seguir complementándose para prestar una mayor atención en los ámbitos de las sociedades iberoamericanas más vulnerables, como los menores, los ancianos, las personas con discapacidad o los que viven en la pobreza.
También a favorecer el acceso a la educación, la sanidad, la vivienda y a un trabajo y una vivienda dignos.
Se trata, ha añadido don Felipe, de superar de «una manera más efectiva las discriminaciones y las exclusiones en democracia para llegar a construir un mundo más justo».
Felipe VI ha expresado su «admiración y gratitud» a Acoes por la tarea «tan ejemplar» que llevan a cabo en favor de las personas más necesitadas y por la contribución «imprescindible» de sus voluntarios.
El rey ha aprovechado para recordar que Honduras es un país «muy querido» con el que España mantiene «unos lazos tan antiguos como profundos y vivos» en la actualidad.
Al acto, han asistido el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo; el Defensor del Pueblo en funciones, Francisco Fernández Marugán, y del rector de la Universidad de Alcalá, José Vicente Saz, así como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Felipe VI ha entregado el galardón al presidente de Acoes, Patricio Larrosa, el sacerdote natural de Huénaja (Granada) que fundó la ONG en 1993 con la idea inicial de ayudar a un grupo de jóvenes a que pudieran estudiar.
Acoes atiende en la actualidad a más de 70.000 personas, de los que 11.000 son niños que reciben educación en diversos barrios marginales para poder acceder a la universidad.
Cuenta además con más de 200 voluntarios y colabora con ONG de varios países, entre ellos, España.
Larrosa ha afirmado que Acoes es «una historia de miles de personas extraordinarias», que «motivan a mirar el futuro con una gran esperanza» y que representan «el motor del cambio».
«Esa semilla es la que va a crear un mundo más justo y esa semilla está creciendo en Honduras. Nuestro proyecto es crear solidaridad con la educación y educar en la solidaridad», ha resumido.
Larrosa ha relatado los casos de algunas de esas personas, entre ellas las de Pablo, Miguel u Olga, a los que Felipe VI también ha querido rendir su homenaje como ejemplos de las comunidades beneficiadas.
El sacerdote granadino ha asegurado que a pesar de ser un país «muy desconocido y del que lo poco que se oye hablar es muchas veces negativo», en Honduras «hay otra verdad oculta en los barrios» donde hay gente que aspira a «un mundo más justo y humano».
Larrosa también ha elogiado la labor de los cooperantes que trabajan con Acoes, en particular, los que hay en muchas ciudades españolas.
«La generosidad también es marca España», ha añadido el presidente de la ONG, que en esta edición compitió con otras 27 candidaturas de doce países.
