EFE.- El PP ha rechazado este jueves que las Cortes Valencianas condenen los posados con símbolos y banderas fascistas protagonizados por dirigentes y cargos públicos del PPCV, y que este partido pida el acta a los concejales y se sancione a los militantes que han protagonizado estos gestos.
Una propuesta de Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) pedía la condena de estos actos y se ha debatido en la comisión parlamentaria de Coordinación, donde ha contado con el apoyo del resto de grupos de la oposición.
El PP, sin embargo, había propuesto sustituir ese texto por otro que expresara el rechazo a toda las actitudes y símbolos que no respeten la Constitución y el Estatut d’Autonomia, pero EUPV no lo ha aceptado al considerar que pretendían «desviar la atención» debido a que los populares no estarían «dispuestos a condenar su pasado franquista».
La iniciativa ha sido defendida por el portavoz adjunto de EUPV Ignacio Blanco, quien ha recordado que el verano pasado hubo una «exaltación de símbolos fascistas» por varios dirigentes y militantes del PP valencianos y de Nuevas Generaciones de ese partido, que se hicieron fotografías ante banderas franquistas o nazis, o haciendo el saludo fascista.
Blanco ha señalado que, a pesar de la «gravedad» de esos hechos, no se ha adoptado «ninguna medida efectiva» contra esos militantes populares ni se les ha expulsado, y ha reclamado «firmeza» contra este tipo de simbología, ya que «el fascismo no es compatible con la democracia ni con la convivencia pacífica».
El diputado del PP Eduardo Ovejero ha acusado a EUPV de buscar la «censura expresa» de Nuevas Generaciones de la Comunidad Valenciana, una organización con más de 7.000 miembros que en su opinión «ha demostrado sobradamente» que sus valores son la libertad y la tolerancia, por unos «hechos aislados» que «han condenado» y por los que «han pedido disculpas».
Para Ovejero, se debe condenar el uso de «cualquier símbolo anticonstitucional, provenga de quien provenga», y todas las actitudes que «no respeten lo consagrado» en la Constitución, y ha recordado que se abrieron «de inmediato» expedientes informativos a esas personas y se resolverán de manera individual.
La diputada socialista Clara Tirado ha reprochado al PP que sus «cachorros» tengan nostalgia del sistema «dictatorial y represivo», a pesar de ese partido es «el más autoritario y corrupto de la historia», y ha considerado que «en realidad, añoran la impunidad».
La diputada de Compromís Mireia Mollà ha acusado al PP de «mirar hacia otro lado» ante las «barbaries, crímenes y genocidios» y no actúan con «contundencia», con lo que contribuyen a que «en otro momento de la historia esto se vuelva a producir».