Es contrario a la adopción de parejas homosexuales, rechaza a los musulmanes y quiere la doble nacionalidad en la región italiana del Tirol
PABLO LÓPEZ BARBERO. EL MUNDO.- El programa del Partido de la Libertad de Austria (FPÖ) de Norbert Hofer, que disputa la Presidencia al ecologista Alexander Van der Bellen por un puñado de votos, está cimentado sobre una base populista y xenófoba similar a la de otros partidos europeos de extrema derecha.
Su mensaje ha calado en gran parte de la sociedad austriaca, descontenta con los partidos tradicionales que no han conseguido atajar los principales problemas del país como la crisis de refugiados o el creciente desempleo.
Rechazo de los refugiados y musulmanes
Bajo el lema «Austria y los austríacos primero», el candidato ultra ha hecho del rechazo a los refugiados y los musulmanes el eje de su campaña y los ha vinculado con el aumento del paro y la criminalidad. Aunque se muestra a favor de la permanencia de Austria en la UE, critica con dureza la creciente influencia de las instituciones comunitarias y se opone de pleno a la entrada de Turquía en la Unión y al rescate de Grecia y de otros países en crisis.
En el clima enrarecido que vive el país, con un gobierno de gran coalición inmerso en divisiones internas y en medio de una crisis migratoria sin precedentes, sus propuestas de una mayor democracia directa -con la celebración de referendos con mayor frecuencia- o su oposición al acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, el TTIP, también le han hecho ganar adeptos.
Contrario a la adopción de parejas homosexuales
También es partidario de abolir el derecho de adopción de las parejas homosexuales y se muestra como defensor a ultranza del concepto de familia tradicional.
En otro orden de cosas, el partido de Hofer defiende la doble nacionalidad italo-austriaca a los habitantes de Tirol del Sur (que desde 1919 forma parte de Italia) y se confiesa un enamorado de las armas de fuego, cuyo uso llegó a justificar como defensa personal «en tiempos convulsos».
Simpatía de los discapacitados
Su nombre despierta asimismo grandes simpatías entre los discapacitados y no ha dejado de prometer más dinero para dependencia. Él mismo lleva bastón y tiene dificultades al andar desde que en 2003 sufriera un grave accidente de parapente que le dejó postrado en silla de ruedas durante varios meses.
El considerado «cara amable» del ultraderechista FPÖ ha hecho una campaña muy mediática y cercana al elector. Sus numerosas apariciones en televisión ha permitido que su mensaje populista cale hondo, sobre todo en zonas rurales y pequeñas ciudades, donde ha batido a su rival Van der Bellen. Con mensajes del tipo «no quiero que Austria se convierta en un país musulmán» o «el Islam no forma parte de mi país», Hofer ha recabado numerosos apoyos de una parte del electorado que ve con enorme preocupación la oleada de refugiados.
Hofer es además el encargado de redactar el programa electoral de su partido, en el que abundan las medidas antiinmigración. Su voto -decía en campaña- garantiza «la cultura, los valores, la tradición y la seguridad frente a la nueva inmigración» que, asegura, «destroza el sistema social austriaco».