Henry Bolton ha sido destituido en un congreso extraordinario acosado por el escándalo surgido por unas declaraciones racistas de su expareja contra la novia del príncipe Enrique de Inglaterra
EL PERIÓDICO.- Nuevo revés para el partido eurófobo y xenófobo británico Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP) que no logra salir de la grave crisis en el que está inmerso y que amenaza con hacerlo desaparecer del mapa político del Reino Unido. Los participantes al congreso extraordinario que la formación de extrema derecha ha celebrado este sábado en Birmingham han destituido por votación al que hasta ahora su máximo dirigente, Henry Bolton, de 52 años. Es la cuarta vez en menos de dos años que el partido se ha quedado sin líder, desde que el dirigente histórico Nigel Farage dejara el cargo poco después del referéndum del 23 de junio del 2016 en el que una mayoría de votantes británicos apostaron por el ‘brexit’.
La destitución de Bolton tiene que ver con el escándalo protagonizado por su expareja sentimental, la modelo británica Joe Marney, de 25 años, que hizo unos comentarios racistas contra la novia del príncipe Enrique de Inglaterra, Meghan Markle, con la que contraerá matrimonio el próximo mes de mayo. Marney escribió a un amigo que con este matrimonio Markle iba a «contaminar» a la familia real.
El voto de censura contra Bolton ha obtenido 867 papeletas frente a las 500 que le han renovado la confianza. La nueva crisis política coincide con graves problemas económicos en el seno de la formación. El UKIP afrontará ahora en un plazo de 90 días un proceso de selección interna para escoger al que será el nuevo dirigente del partido y, mientras tanto, se hará cargo de la formación de forma interina el eurodiputado Gerard Batten.
Acosado por la polémica
Bolton, que se hizo cargo del UKIP en septiembre del 2017, ya se había negado a dejar el cargo acosado por la polémica en enero cuando tuvo que hacer frente a un voto de confianza del Comité Ejecutivo del partido. Bolton, que se ha separado de su mujer, se defendió entonces argumentando que ya había roto su relación con la joven modelo.
En una entrevista al ‘Daily Telegraph’ publicada el pasado jueves, Farage, deploró el escándalo, aunque afirmó que apoyaba a Bolton al condiserar que la situación del UKIP era ya lo suficientemente crítica como para enfrascarse en buscar un nuevo líder. «La alternativa para el partido sería continuar en la via de la autodestrucción, hasta convertirse en algo insignificante», advirtió.
La joven modelo no ha tardado en reaccionar vía Twitter a la destitución de Bolton: «Una banda de cretinos. Mi amor por Henry no depende de esas batallas políticas», ha escrito.
