EL RASTREADOR. ELDIARIO.ES.– El cabeza de lista para las elecciones europeas por Vox, Jorge Buxadé, lleva este último mes acumulando polémicas declaraciones. Esta vez, el candidato al Parlamento Europeo ha aseverado que no se arrepiente de su paso por Falange, pero sí «de haber sido militante del PP».
Entrevistado por el diario El Mundo, Buxadé ha respondido con un rotundo «no» a la pregunta de si se arrepentía de su pasado en Falange. «Políticamente de lo que me arrepiento es de haber sido militante del PP desde 2004 hasta 2014», ha declarado. El ahora candidato de Vox añade que el punto de quiebre fue «cuando Rajoy permite el primer referéndum separatista de Catalunya». E insiste: «De eso sí que me tengo que arrepentir. De lo que hice de joven, ilusionado y con convicciones patrióticas, pues no…».
Las relaciones de Buxadé con el PP, de las que dice arrepentirse, fueron más allá de lo estrictamente político a partir de 2012, cuando su despacho de abogados cobró del ayuntamiento de Badalona, gobernado por Xavier García Albiol, por trabajos mensuales. Estas relaciones se llevaban a cabo a través de una fundación opaca, que llegó a facturar 110.000 euros, como adelantó en exclusiva eldiario.es.
Después de cargar contra su anterior partido, el candidato de Vox se defiende de aquellos que puedan ver su paso por Falange como algo incompatible con la política actual. «Es que eso a mí me da igual, afirma. «Que me pregunten de cosas de hace 40 años no tiene sentido», añade a continuación Buxadé, que se afilió a Vox en 2015. Cabe preguntarse si por cosas «de hace 40 años» se refiere a la dictadura franquista, pues su paso por Falange es bastante más reciente. Fue en 1995 cuando formó parte de la lista para el Parlament de Catalunya por Falange Española de las JONS.
«Feministas feas»
En la misma entrevista, el candidato del partido de Santiago Abascal ha defendido sus afirmaciones de este miércoles, cuando arremetió contra las «feministas feas que dicen a las mujeres españolas lo que tienen que hacer» en un mitin celebrado en Madrid.
«El feo es un feo de alma. No me meto en las cuestiones estéticas. Las feministas feas de alma lo son porque intentan imponer criterios morales a las niñas y esto no es aceptable», subraya Buxadé, para afirmar a continuación que la educación «es una cosa de mamás y de papás» y que las feministas «no les tienen que decir cómo hablar a sus hijas».
El candidato critica al «adoctrinamiento del feminismo radical» frente a un «feminismo clásico» que, asegura, es el «entendido como igualdad del hombre y mujer ante la ley». «Aquel que no respete esa igualdad tendrá que ser severamente castigado. Somos nosotros los que lo decimos, precisamente», amenaza el candidato.
Pero aunque dice no meterse con la estética de las feministas, sí opina sobre el atuendo de los diputados, y les afea que concurran al Congreso con camiseta. «Yo les pediría que se pusieran camisa y corbata porque están representando a todos los españoles».