Anteriormente había sido cargo público del PP en el ayuntamiento de Hinojares
EL PERIÓDICO.- El empresario olivarero que el pasado fin de semana fue detenido tras abandonar el cadáver de un temporero marroquí en las puertas de un centro de salud fue apoderado de Vox en las pasadas elecciones generales del 10 de noviembre. El joven, de 34 años y que está en libertad con cargos acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores, acumula una larga trayectoria política en partidos de derecha, ya que anteriormente concurrió a las elecciones municipales de su pueblo, Hinojares (Jaén), con la candidatura del PP.
La Cadena Ser en Jaén ha desvelado la intensa vinculación del empresario con las formaciones de derecha en la provincia, en algunas de las ocasiones incluso llegando a ejercer puestos de responsabilidad pública. Según aparece en el Boletín Oficial de la Provincia de Jaén, Francisco M.E. concurrió en sexto lugar en la candidatura del PP por su municipio en las pasadas elecciones municipales de mayo, aunque no obtuvo acta de concejal dado que los populares sólo lograron tres representantes por la victoria del PSOE. Con anterioridad, en 2011, también concurrió como número 2 de las listas, aunque entonces los resultados fueron mejores: el PP ganó los comicios y Francisco entró en el Ayuntamiento con diversas responsabilidades municipales. En 2015, y ya en puestos de cola, no logró revalidar su acta.
Ocho meses después, sin embargo, el detenido participó en los comicios generales como apoderado de la formación que lidera Santiago Abascal, muy crítica siempre con el papel de la inmigración irregular, ya que entienden que quitan trabajo a los ciudadanos españoles. Eso no impidió, sin embargo, que Francisco M.E. contratara de manera ilegal al inmigrante marroquí sin documentación.
El empresario fue localizado en la misma explotación agraria en la que trabajaba el temporero fallecido, y que fue identificada gracias a un compatriota de la víctima que, de forma precaria al no dominar el castellano, pudo orientar a la Guardia Civil. Según detallaron fuentes del caso, el trabajador fallecido, que estaba de manera irregular en nuestro país, había sido contratado de forma irregular ese mismo día por la mañana y él mismo los llevó al tajo.
A falta de la confirmación de la autopsia, todo indica que el inmigrante, que malvivía en una casa de forma ilegal, sufrió un infarto mientras recolectaba aceituna y cayó desplomado. El empresario lo trasladó al centro de salud de Pozo Alcón y, tras dejarle en una camilla, se dio a la fuga. Los médicos confirmaron que el joven, de 31 años, llegó ya cadáver. Pocas horas después, su contratador era arrestado.