El Periódico.- Pidió en el 2018 que se actuara para evitar el abandono escolar de niños gitanos y que se creara un organismo para promover la igualdad
La Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI, por sus siglas en inglés) del Consejo de Europa ha reprochado este martes a España la falta de avances en la lucha contra el racismo y lo ha centrado en dos temas: el abandono escolar de niños gitanos y la creación de un organismo que promueva la igualdad. Hace casi tres años, la ECRI formuló unas recomendaciones para actuar en estos ámbitos y, ahora, un informe de progreso constata que «no se han aplicado las recomendaciones».
Así, en el anterior informe –del 2018– se pidió crear «con urgencia» un organismo «fuerte e independiente» que promocione la igualdad y la lucha contra el racismo y la intolerancia. Se ofreció como alternativa garantizar que el Consejo para la Eliminación de la Discriminación Racial y Étnica (CERD) fuera independiente del Ejecutivo, con presupuesto e infraestructura dignos, posibilidad de recibir quejas y ayudar a las víctimas.
Las autoridades españolas han informado a la ECRI de que elaboran un proyecto de ley de igualdad de trato y contra toda forma de discriminación, «como base para la creación de un organismo independiente de igualdad con suficientes recursos humanos y presupuestarios». Los interlocutores españoles del organismo del Consejo de Europa lamentan que los trabajos quedaran interrumpidos por las dos consultas electorales de 2019 y hasta que se formó un nuevo Gobierno en enero de 2020. La ECRI es consciente de que el acuerdo del Gobierno de coalición incluyó esa ley, pero lamenta «que no haya un calendario para su preparación y adopción» y que el CERD «no ha mejorado su situación». Añade el informe que los recursos humanos y presupuestarios del CERD «no han sido reforzados» desde la publicación del último informe.
Asimismo, el texto de 2018 destacó que «es necesaria una inversión sustancial en educación para asegurar que los niños gitanos y los procedentes de fuera de la UE completen su educación obligatoria» y «evitar una nueva generación de niños de minorías excluidas». Ahora concluye que «no se han adoptado nuevas medidas concretas para garantizar el aumento de niños romaníes que completan la escolaridad obligatoria» y señala que «no hay datos estadísticos que indiquen un aumento en esa proporción». La Comisión de la organización paneuropea sí ve «con satisfacción la ejecución de algunos proyectos» que proporcionan apoyo educativo a la comunicad gitana en algunas comunidades autónomas.