267 de las 290 agresiones sufridas por los internos en los Centros de Internamiento de Extranjeros de todo el Estado tuvieron lugar en el de Barcelona, según datos del Gobierno. El Estado ha gastado más de 642.861 euros en los últimos 6 años en el CIE de la Zona Franca
SONIA CALVÓ. ELDIARIO.ES.- 267 de las 290 agresiones registradas sufridas por los internos en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) de todo el Estado –de 2010 a 2016– tuvieron lugar en el CIE de Barcelona. Este centro, situado en la Zona Franca, acumula el 92% de las agresiones estatales registradas. Así lo confirma el Gobierno a raíz de una pregunta del diputado del PSOE Antonio Trevín, según ha avanzado el periódico Nació Digital . No obstante, estas cifras no distinguen entre internos que han resultado heridos «como consecuencia de la agresión de otro interno» o por «lesiones causadas en los enfrentamientos con la Policía Nacional».
Las cifras presentadas por el Gobierno no incluyen tampoco los internos que han resultado heridos en los CIE de Valencia ni el de Múrcia. El Gobierno lo justifica porque «se carece de registro» aunque «los citados datos están incorporados en los expedientes individuales de cada interno». No obstante, aunque no se dispone de las cifras concretas de las agresiones sufridas por internos, sí que constan el número de policías que han resultado heridos como consecuencia «de ataques» de los internos desde 2010. El CIE de Barcelona vuelve a encabezar la lista, con 32 policías heridos. Le siguen el de Múrcia con 30, Valencia con 14 y Madrid con 8.
«Hay más internos heridos que los que constan en estas cifras», aseguran des de Tanquem els CIE ( Cerremos los CIE). «Cuando alguien denuncia es el primero en ser deportado», matiza Jordi Campabadal, miembro de esta entidad. Campabadal también se muestra preocupado por el hecho de que no consten las cifras del CIE de Valencia ni de Múrcia. A lo que añade que no les «sorprende» que Barcelona encabece la lista porque «las condiciones en el CIE de la Zona Franca son especialmente duras», recordando el último incidente en este centro, cuando 68 internos iniciaron una huelga de hambre para pedir su libertad. El Ayuntamiento de Barcelona ha ordenado precintar el centro y ha dado dos meses al ministerio para cerrar definitivamente el CIE de la Zona Franca.
Sin embargo, la mayoría de las personas encerradas en estos edificios no son expulsadas. De las 6.930 migrantes que pasaron por ellos en 2015, fueron deportados 2.871, el 41% de estos, según los últimos datos recogidos por el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP) del Defensor del Pueblo. Estas cifras muestran que encerrar a las personas indocumentadas «se convierte en una medida punitiva, un castigo, cuando tendría que ser preventiva», valoran desde Tanquem els CIE.
Al analizar año por año se constata que, según las cifras del Gobierno, en el CIE de Barcelona, en el año 2016, hubo 11 internos heridos y 3 policías. En el 2015 el contraste es mayor: 56 internos heridos pero ningún policía. Y en 2014, 60 internos y 3 policías. Desde la creación del CIE de Barcelona, tres personas han muerto en las instalaciones: Mohammed Abagui, Alik Manukyan y, el más reciente, Idrissa Diallo. En Madrid hace cinco años murió una interna, Samba Martine, por falta de atención sanitaria en el centro.
Los CIE, en el punto de mira
En estos centros no penitenciarios se encierra a personas migrantes en situación irregular durante un máximo de 60 días con el objetivo de proceder a su expulsión forzosa del país. El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, informó recientemente de la creación de tres nuevos CIE en Málaga, Algeciras y Madrid. Una decisión que llega en pleno debate por el cierre de estos centros.
A mediados de octubre, 39 personas pidieron su salida del CIE de Madrid, organizando un motín. Estuvieron más de 11 horas apostadas en el tejado del edificio gritando «libertad» y «clemencia». En Múrcia, el 14 de noviembre se escaparon una docena de internos del CIE. Varias asociaciones, partidos políticos y el Sindicato de Policía han denunciado las malas condiciones de seguridad en este centro y piden su cierre. El de Múrcia registra el mayor número de fugas intentadas y realizadas, con 147 personas. Le sigue el de Algeciras, con 67.
El Estado ha gastado, como mínimo, 642.861 euros en los últimos 6 años en el CIE de la Zona Franca. Se calcula que el gasto podría ser mayor, ya que entre los años 2010 y 2014 el gasto de luz estaba centralizado en Madrid. Los gastos farmacéuticos del 2010 todavía no estaban descentralizados.