ABC.- Pese a que los delitos por orientación sexual e identidad de género no son, dentro de los de odio, los más numerosos, los ataques contra el colectivo LGTBIQ+ continúan a la orden del día. Así lo recoge la encuesta ‘El colectivo LGTBIQ+ en la ciudad de Madrid’, encargada por el Ayuntamiento de Madrid a una empresa externa, en la que una de cada cuatro personas en Madrid reconoce haber sufrido acoso, amenazas e insultos en los últimos cinco años. Cerca del 6% de los participantes aseguran haber sido víctimas de agresiones físicas o sexuales, mientras que el 63,7 por ciento advierten que el colegio o instituto es el lugar en el que sienten que más discriminación se produce.
Estos y otros datos fueron presentados el viernes por la vicealcaldesa, Begoña Villacís, el titular del área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, y el director general de Innovación y Estrategia Social, Héctor Cebolla. La encuesta se ha llevado a cabo a partir de 600 entrevistas válidas entre residentes en Madrid de 18 a 75 años que se han reconocido de forma anónima como LGTBIQ+.
Dentro del proyecto piloto para abordar agresiones LGTBIfóbicas, Aniorte reveló que se ha atendido a 21 personas desde mediados de abril, cuando arrancó, hasta el 1 de junio, siendo Centro y Latina los distritos donde más ataques se registraron.
Centros de mayores municipales
Por otro lado, el propio área de Familias, Igualdad y Bienestar Social reabrirá los 90 centro de mayores municipales de forma progresiva. El retorno de la actividad a estos espacios municipales comenzará a partir de mañana, habiéndose elaborado para ello un protocolo de carácter general, a partir de las directrices de la Comunidad de Madrid.
Desde el área de Familias explican que la reapertura será escalonada «debido a que cada instalación tendrá que readaptar todos sus espacios y sus actividades atendiendo a sus particularidades propias». Estos centros contarán con un sistema de cita previa y horarios establecidos para cada usuario, control de aforo, mecanismos de ventilación, cartelería y turnos de acceso y de salida, entre otras medidas para evitar el patógeno.