Las muestras de apoyo a los reclusos de la banda terrorista sobresalen en una cita en la que domina el ‘stand’ de la coalición ‘abertzale’, que hace propaganda de «las otras víctimas del conflicto»
JOSE MARI ALONSO. EL CONFIDENCIAL.– El brindis por los presos de ETA no solo llega de palabra. También con el propio vaso, donde es visible a gran tamaño la inscripción ‘Kalera Kalera’, la iniciativa a favor de los reclusos etarras impulsada por la ‘izquierda abertzale’. Los recipientes para la bebida que se sirven en la barra del bar son una de las numerosas muestras de apoyo a los presos que ofrece la contracumbre organizada en Irún por las plataformas G-7 Ez (No, en euskera) y Alternatives G-7 para protestar por la reunión este fin de semana de los principales mandatarios mundiales en la cercana localidad francesa de Biarritz.
El brindis por los presos de ETA no solo llega de palabra. También con el propio vaso, donde es visible a gran tamaño la inscripción ‘Kalera Kalera’, la iniciativa a favor de los reclusos etarras impulsada por la ‘izquierda abertzale’. Los recipientes para la bebida que se sirven en la barra del bar son una de las numerosas muestras de apoyo a los presos que ofrece la contracumbre organizada en Irún por las plataformas G-7 Ez (No, en euskera) y Alternatives G-7 para protestar por la reunión este fin de semana de los principales mandatarios mundiales en la cercana localidad francesa de Biarritz.
Las mesas informativas y de venta de ‘merchandising’ y libros instaladas por algunas del centenar de asociaciones sociales, colectivos antisistema, sindicatos y partidos que respaldan la contracumbre parecen hormigas ante el dominio de la carpa instalada por EH Bildu, donde la propaganda a favor de los etarras encarcelados ‘hace cumbre’. Los mensajes que la coalición ‘abertzale’ ofrece en respuesta a la presencia del G-7 en Biarritz se limitan, en esencia, a los presos de ETA. Y a poner de manifiesto los pasos dados por la banda terrorista, con sus declaraciones de alto el fuego y disolución definitiva y el desarme llevado a cabo, para “facilitar la paz”.EH Bildu reparte un folleto informativo que contiene «cuatro nociones que todo turista debería conocer» para «lidiar con los negacionistas del conflicto»
Las “consecuencias ocultas del conflicto” toman cuerpo en la contracumbre con el folleto informativo que la iniciativa Kalera Kalera ha editado este verano en cuatro idiomas —castellano, euskera, francés e inglés— para distribuir a los turistas, periodistas internacionales e incluso deportistas de diferentes nacionalidades con la vocación de que se empapen de “una realidad que les es desconocida”. Se trata de un impreso de 12 páginas que, según asegura esta dinámica, contiene “cuatro nociones que todo turista debería conocer” para “lidiar con los negacionistas del conflicto”.
En este “relato de la realidad vasca que otros ocultan” no hay ninguna referencia a las más de 850 víctimas mortales de ETA ni a los miles de heridos y damnificados por su actividad. Únicamente a “las otras víctimas”, que cuantifica en 40.000 “detenidos políticos”, 7.500 personas encarceladas, 104 muertos por la Policía y 83 por el “terrorismo de Estado”, o 2.500 personas que “huyeron de la tortura y la prisión sufriendo todo tipo de situaciones dramáticas”. Habla del «precio» que han supuesto para el País Vasco la política penitenciaria del Estado, las estancias en la cárcel o el alejamiento de los presos, pero no del precio que tuvieron que pagar los amenazados o acosados por la banda terrorista.
EH Bildu es, por su dominio físico y la presencia de dirigentes, el absoluto líder de la contracumbre, el ‘Donald Trump’ de este evento en contra de los principales mandatarios mundiales, que también cuenta con el apoyo expreso de Podemos y de Izquierda Unida. Los chalecos amarillos también tienen su espacio en el recinto ferial de Ficoba, si bien su centro de actividades está ubicado en la macroacampada que se desarrolla al otro lado de la muga, en Urruña, donde se van a instalar numerosas personas que participarán en las diferentes actividades organizadas en protesta por la presencia en Biarritz de las delegaciones encabezadas por Donald Trump (Estados Unidos), Angela Merkel (Alemania), Boris Johnson (Reino Unido), Justin Trudeau (Canadá), Shinzo Abe (Japón), Emmanuel Macron (Francia) y el representante de Italia (estaba prevista la presencia del recientemente dimitido primer ministro Giuseppe Conte).
«¡Fuera del País Vasco, no sois bienvenidos!«, grita a unos caricaturizados líderes mundiales un cartel en euskera con la firma de Askapena. A su lado, otro cartel de Euskal Herria Burujabe clama por “volver a controlar nuestra vida” y defiende “frente al G-7 y a su mundo, 1.000 proyectos de territorios soberanos, solidarios y sostenibles”. Pancartas contra el proyecto del tren de alta velocidad vasco, la incineradora de Guipúzcoa o la privatización del aeropuerto de París se mezclan con mensajes políticos a favor de Palestina, Venezuela o Cataluña. No faltan esteladas ni ikurriñas, como tampoco las banderas a favor de los presos junto al ‘stand’ de EH Bildu, donde un puesto vende todo tipo de ‘merchandising’ de apoyo a los reclusos de ETA.
Los procesos soberanistas de Cataluña y del País Vasco también se han instalado en la contracumbre de la mano de la plataforma Gure Esku Dago (Está en nuestras manos, en euskera), una especie de Asamblea Nacional Catalana (ANC) en el País Vasco, que también incluye Navarra en el saco independentista. “En Navarra, aunque la situación está bastante revuelta, se necesita un nuevo estatus y está en ello. El derecho a decidir también está en el centro. Tienen opción a estar en la agenda”, proclama un panel colocado por esta asociación y que llama a la ciudadanía a «pasar de la solidaridad a trabajar junto a Cataluña».
La independencia vasca y catalana está presente igualmente a través de las diferentes conferencias organizadas —el programa contempla cerca de un centenar de charlas, proyecciones y talleres en Irún y Hendaya (Francia)—, en las que participarán el líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, o la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que lo hará por videoconferencia. Cargos ‘abertzales’ han acudido este jueves a las conferencias que han abordado “la situación de los presos políticos en el proceso de liberación nacional y social”, “el papel de los movimientos sociales en los procesos de Cataluña y el País Vasco” o “el proceso de paz en el País Vasco”, entre otras charlas programadas durante la jornada. Este viernes, Otegi disertará en Hendaya sobre “diálogos entre naciones sin Estado” dentro de las diferentes actividades programadas por la organización, que tiene como una de sus caras visibles a Egoitz Urruticoechea, hijo del histórico jefe de ETA Josu Ternera.
Irún es, desde hace días, una ciudad tomada por fuerzas policiales de España y Francia, que han establecido un macrooperativo en torno a la frontera, con permanentes controles en los diferentes puntos fronterizos para blindar la cumbre del G-7 de este fin de semana, en la que participará como invitado el presidente español en funciones, Pedro Sánchez. En su conjunto, el despliegue lo conforman del orden de 20.000 agentes policiales: más de 13.000 efectivos de las fuerzas de seguridad francesas, cerca de 3.000 de las FSE —1.878 de la Guardia Civil y 932 de la Policía Nacional, según ha detallado este jueves el ministro de Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, en su visita al operativo policial español— y 4.000 ‘ertzainas’ de las diferentes unidades, lo que supone que más de la mitad de la actual plantilla de la Policía autonómica, con competencias en orden público y seguridad, estará destinada al operativo establecido para la cumbre.
Marlaska reconoce que radicales «infiltrados» intentarán boicotear la cumbre del G-7 en Biarritz
Un coche de la Ertzaintza permanece apostado a las puertas del recinto ferial Ficoba, ubicado a escasos pasos del puente de Santiago, uno de los accesos al país galo, donde los controles siguen a la orden del día. Los automóviles deben armarse de paciencia ante los constantes atascos y los ciudadanos de su DNI, ya que es necesario portar la documentación para poder atravesar la muga. Los pasos fronterizos ejercen de filtro ante la prevista llegada de 10.000 activistas a ambos lados del Bidasoa para participar en los diferentes actos de protesta programados para los próximos días.
Las principales protestas en la calle impulsadas por las plataformas G-7 Ez y Alternatives G-7 se plasmarán en la manifestación que unirá Hendaya e Irún el sábado a partir de las 11:00 y en la “acción de desobediencia civil” del día después consistente en siete concentraciones entre las 12:00 y las 16:00 en diferentes localidades francesas próximas a la blindada Biarritz. Los organizadores aseguran que las acciones se llevarán a cabo con “calma y determinación”, en “un espíritu de construcción y de resistencia”, y con “métodos y técnicas no violentos y pacíficos para mostrar nuestra determinación”. Hay consignas de “no llevar a cabo una estrategia de confrontación con las fuerzas policiales”, pero los organizadores aseguran que en caso de “cargas y violencias policiales, implementaremos técnicas de resistencia no violentas” que, según afirman, se “definirán de forma conjunta”.
La contracumbre está en el radar policial, pero la principal preocupación de las fuerzas de seguridad se encuentra en la previsible actuación de los radicales activistas antisistema. Grande-Marlaska admite que se trabaja con el escenario de que incontrolados se «infiltren» para provocar el caos. Es, como evidencia, lo que ha ocurrido en otras cumbres similares. Para prevenir actos violentos de movimientos como —ha citado— los chalecos amarillos, radicales o anarquistas, que “buscan tener su protagonismo” en este tipo de acontecimientos, el ministro de Interior en funciones ha puesto en valor que los cuerpos policiales españoles y franceses “estamos preparados para garantizar la seguridad y los derechos y libertades de los ciudadanos”.
Las autoridades contemplan como previsibles escenarios violentos el corte de autopistas, carreteras o vías de ferrocarril a ambos lados de la frontera. También posibles acciones en peajes y en el aeropuerto de Biarritz. El objetivo policial es evitar los bloqueos masivos en las principales vías de transporte. De hecho, en función del cariz que tomen los acontecimientos, no se descarta cerrar la frontera de Biriatou. “Todos los escenarios están contemplados”, advierte la consejera vasca de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia.
Mientras, a la espera de posibles incidentes, la contracumbre se desarrolla con tranquilidad, sin gran afluencia de asistentes de momento. ‘Defendamos nuestras alternativas’, reza el lema de esta cita que se desarrolla en Ficoba. Y cada uno tiene la suya. “No te quedes quieto, que se te pone tieso”, grita por un megáfono una persona a las puertas del recinto ferial entre otro tipo de ‘reivindicaciones poéticas’. Todos quieren llevar su mensaje alternativo a la contracumbre. Y algunos sorprenden más que otros.
