La Razón.- Se trata de dos historias en las que aparece un personaje africano bajo un hechizo vudú y que la compañía considera que debe eliminar como parte de su compromiso con la diversidad.
Dos de las historias de Scrooge McDuck, en español, el Tío Gilito, serán eliminadas. Ya no volverán a imprimirse por, a juicio de Disney, no compartir los valores de la compañía por incluir personajes que la multinacional considera no apropiados con los tiempos que corren. Se trata de las historias de “El pato más rico del mundo” y “El sueño de una vida”, en las que aparecen un personaje de rasgos de raza negra, de origen africano, embrujado por un rito vudú llamado Bombie el Zombie.
El anuncio, realizado por los fans del autor de estas tiras cómicas, el estadounidense Keno Don Hugo Rosa, conocido como Don Rosa, llega después de los sonados casos de “limpieza” o “reescritura” que se han llevado a cabo con los trabajos de Ian Fleming (autor de James Bond) y de Roald Dahl (creador de “Matilda”). La compañía informó al propio ilustrador que consideraba “inapropiadas” las historias y que “ya no son aceptables para los valores actuales de la compañía”. En un correo electrónico, Disney incidía en que la compañía lleva a cabo un proceso “de revisión de sus obras” y que, por tanto, las dos historias citadas “ya no formarán parte de colecciones republicadas o nuevas”.
El ilustrador, nacido en Kentucky, lleva cuatro décadas trabajando para Disney y se lamentaba por que el resto de sus cuentos “también pasase por la censura. ¿Cuántas historias del pato van a caer?”, se preguntaba en sus redes. En las citadas historia, Bombie el Zombie, trata de impedir que el Tío Gilito, el epítome del capitalismo, siga haciéndose más rico. Es una marioneta del chamán Foola Zoola, el rival del Tío Gilito.
Ante la polémica generada, Don Rosa informó a sus seguidores que el mismo editor que le había anunciado el cese de las historias, comentaba que estaban “estudiando” qué hacer. Aunque no albergaba grandes esperanzas, al menos confiaba en que, a la hora de tomar las decisiones del futuro, “prevalezcan las mentes más sanas”.