20 Minutos.- La Policía Nacional han detenido en Alicante a cuatro personas por obligar a una joven a casarse con su primo, 18 años mayor que ella, a cambio de 1.000 euros. Los detenidos, de nacionalidad marroquí, de entre 35 y 52 años de edad, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de la localidad de Alicante por delitos de trata de seres humanos, lesiones y violencia doméstica.
Dos de los arrestados son los padres de la víctima, una joven de 22 años de edad que se encontraba en situación de vulnerabilidad y había sufrido durante años malos tratos físicos y psíquicos por parte de sus progenitores. Los otros dos detenidos son la tía y el primo de la joven.
La investigación policial tuvo su inicio tras una denuncia en la que se daba cuenta de unos presuntos malos tratos en ámbito familiar por parte de unos padres hacia su hija, según ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
La denuncia de la joven
En su denuncia, la joven relató a los agentes que desde niña había tenido problemas con sus padres, llegando incluso a agredirla si hacía algo malo o cuando consideraban que se había portado mal. Tampoco la dejaban relacionarse con gente, ni podía hablar con nadie y lo único que querían era que «cumpliese con sus obligaciones» y se quedase en casa.
Según sus manifestaciones, en septiembre del pasado año sus padres pactaron con una tía suya el matrimonio entre ella y su primo 18 años mayor, a cambio de 1.000 euros, y acordaron en diciembre una cita con el consulado de Marruecos en Valencia para tramitar toda la documentación y llevar a cabo el enlace.
A pesar de la negativa de la joven a contraer matrimonio con su primo, sus padres siguieron con lo pactado, insistiéndole que tenía que casarse con él y, tras su negativa en no querer casarse, seguía recibiendo continuas agresiones e insultos.
Dada la situación de desesperación en la que se encontraba, un día antes del supuesto enlace decidió marcharse de casa y así evitar la boda, si bien tras ser localizada días más tarde por sus padres y volver al domicilio familiar, las agresiones físicas aumentaron, llegando incluso a perder una pieza dental.
Segundo intento de huida
La joven, siendo consciente del maltrato que estaba recibiendo, decidió de nuevo escaparse del domicilio familiar y acudir a un centro especializado en la atención de mujeres víctimas de malos tratos, donde fue atendida y le ayudaron a presentar una denuncia.
En base a los hechos denunciados, agentes especializados de las Brigadas de Extranjería y Fronteras y de Policía Judicial en Alicante iniciaron una investigación con el fin de comprobar su veracidad.
Tras identificar a los presuntos autores, detuvieron a cuatro personas, que eran los padres, la tía y el primo de la víctima, a los que se les imputaron delitos de trata de seres humanos con fines de matrimonio forzado, delito de lesiones y violencia doméstica.