El sospechoso, que colabora en una emisora con gran seguimiento entre la comunidad marroquí residente en Cataluña, insinuó que si la mujer viviera en determinados países le podrían cortar la cabeza por ser atea y faltar al respeto al profeta
GERMÁN GONZÁLEZ. EL MUNDO.- No sólo se verte comentarios ofensivos en las redes sociales, también en los medios más tradicionales podemos encontrar proclamas que pueden incitar al odio. Es lo que considera la Fiscalía contra Delitos de Odio de Barcelona y la Policía Nacional que hizo un hombre que participaba en una emisora de radio local que transmite desde Cornellá de Llobregat a través de la FM y de internet en una cadena que emite dariya (árabe marroquí) y con gran seguimiento entre la comunidad marroquí afincada en Cataluña.
Los agentes detuvieron a este hombre en Esplugues de Llobregat como autor de los delitos de provocación al odio, violencia o discriminación y contra la integridad moral, al considerar que a través de su participación en esta emisora vertían graves acusaciones y vejaciones contra una profesora de filosofía que reside y ejerce en Marruecos. La Policía tuvo conocimiento de estos comentarios a través de un vídeo denunciado por una mujer en la cuenta oficial de la policía.
En las imágenes se veía como el detenido atacaba a la profesora por haber salido en redes sociales fumando y bebiendo una copa de vino y haber faltado al respeto al Profeta. En su intervención en el programa radiofónico, el sospechoso proclamó una larga serie de insultos y vejaciones contra la referida profesora llegando incluso a insinuar que si viviera en otros países de corte más radical le podrían cortar la cabeza por sus hechos o manifestaciones.
La Policía remarca que la víctima es una profesora de filosofía que reside y ejerce en Marruecos y que se ha distinguido recientemente por sus ideas políticas progresistas y críticas contra la religión islámica más radical. Es activista de una asociación pro derechos humanos y firme defensora de los derechos de la mujer. Los presuntos ataques del sospechoso fuero su reacción a una publicación en sus perfiles de redes sociales de fotografías en las que aparecía tomando alcohol y manifestándose contraria a determinadas costumbres tradicionales islámicas sobre la mujer. Este hecho le acarreó numerosas críticas por parte de determinados sectores de la sociedad marroquí, e incluso le acarreó problemas laborales. Por tal motivo el centro docente donde trabajaba le relegó de su puesto de trabajo a otro menor, alegando haber encontrado fotografías inmorales en sus perfiles. De estos hechos se hizo eco la prensa marroquí en el año 2014.
Tras recibir la denuncia, la policía informó a la Fiscalía contra los delitos de odio de Barcelona que activó una investigación y se localizó a los responsables de la emisora, así como identificar y localizar al detenido, que se encuentra en libertad con cargos a la espera de su citación por parte del juzgado competente. La Policía también incoado expediente administrativo de expulsión, en aplicación de la vigente Ley de Extranjería, al encontrarse en situación irregular.