EFE.- Dos hombres de nacionalidad española, de 31 y 41 años y residentes en Logroño, han sido detenidos como presuntos autores de ataques a la sede de Ciudadanos (Cs) en la capital riojana, ha informado hoy la Jefatura Superior de Policía de La Rioja, en una nota.
La detención de estas dos personas, quienes tienen antecedentes delictivos, se produjo ayer, día 27, y, tras pasar a disposición de la autoridad judicial, han quedado en libertad con cargos.
Los hechos comenzaron el pasado día 12, cuando los integrantes de la sede de Cs en Logroño encontraron quemado su panel de metacrilato anunciante del partido, que estaba situado en la entrada de la puerta de la oficina, además de poder leerse la pintada «ETA LO PETA. JTK» en la pared del mismo acceso.
El 23 de marzo, Cs denunció el rayado y obstrucción de la cerradura y el hecho de que, sobre la madera del marco de dicha puerta de entrada, se había grabado con las iniciales «ETA».
El último de los hechos denunciados se produjo el pasado día 25 y fue un texto escrito que decía «HIJOS DE PUTA, DELINKUENTES AL SERVICIO DEL PODER», en la placa identificativa del partido, además de haber grabado en la puerta con la palabra «FUERA», y de arrancar la placa identificativa exterior del rellano de acceso al piso.
Desde los primeros hechos denunciados, los agentes de la Unidad que encargada de la investigación de este tipo de delitos se plantearon que podrían constituir, además de un delito de daños, otro de los que comúnmente se conoce como «delito de odio», lo cual se fue corroborando a medida que se fueron repitiendo posteriormente hechos similares y avanzando las investigaciones.
Las investigaciones de la Policía se plantearon desde dos puntos de vista, uno a pie de calle, y otro, a través del estudio de fuentes abiertas en internet.
Como hecho relevante, la Policía ha resaltado que estos sabotajes a la sede de Csen Logroño comenzaron solo dos semanas después de que este partido hubiera cambiado la ubicación de la misma, en una céntrica calle de Logroño, sin que se hubiera producido otro hecho similar en su antigua ubicación, también en el centro de la ciudad.
Esta circunstancia fue un indicio más que llevó a los investigadores a lograr identificar a los autores de los mismos, ha detallado la Jefatura.
Tras ello, estas dos personas fueron detenidas por agentes de esa Unidad de Investigación de la Policía Nacional, y recibidas en declaración sobre los hechos que se les imputaban.
Los hechos podrían constituir un delito de odio, del artículo 510 del Código Penal, que lleva aparejadas penas que van desde multa a prisión desde los seis meses a los cuatro años.
Estas dos personas tienen antecedentes por delitos como atentado contra agentes de la autoridad, resistencia/ desobediencia, daños así como otros tipo de sanciones por alteración del orden público y falta de respeto hacia agentes de la autoridad.
