EFE. DIARIO VASCO.- Las denuncias y abusos basados en la orientación sexual o la identidad de género aumentaron un 44 % en 2018 en comparación con 2017, alcanzando los 698 casos, la cifra anual más alta hasta la fecha, según un informe presentado hoy por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).
Los 698 casos registrados en 2018 (214 más que el año anterior) representan el 22 % del total de los 3.137 contabilizados en los últimos 17 años, señaló el Movilh en la decimosexta edición del Informe Anual de Derechos Humanos de la Diversidad Sexual y de Género.
Por primera vez en una década hubo estancamientos y retrocesos en políticas públicas pro LGBTI, precisó el informe.
Pese a todo, hubo 54 hitos favorables a los derechos de los homosexuales, la gran parte relacionados con la identidad de género, a tal nivel que el 2018 fue definido como el «Año Trans».
El informe del Movilh desglosa las 698 denuncias de 2018 en 3 asesinatos; 58 agresiones físicas o verbales perpetradas por civiles desconocidos por las víctimas; 16 casos de abusos policiales; 28 hechos de discriminación laboral; 37 episodios de exclusión educacional y 102 movilizaciones o campañas homo/transfóbicas.
Además, suma 271 situaciones de marginación institucional; 17 denegaciones de derechos en espacios públicos o privados; 72 actos de violencia comunitaria (familiares, vecinos, amigos, conocidos), 92 declaraciones de odio y 2 abusos en el terreno de la cultura, los medios o el espectáculo.
La mayor alza ocurrió en órganos estatales, en especial en Carabineros, aumentando también los ataques y crímenes de odio.
Las palizas, torturas y robos policiales fueron la categoría de discriminación donde más se incrementaron las denuncias indicó el Movilh, con un 1500 % más que el 2017, seguida por la marginación o intentos de exclusión institucional (613 %), los abusos en la educación (85 %) y los asesinatos (50 %), entre otros.
Asimismo, por tercera vez en 17 años, la población trans acumuló el mayor número de denuncias, con el 39 % del total, correspondiente a 273 casos, el más alto conocido hasta ahora.
La población lésbica, en tanto, acumuló el 13 % del total de casos y la gay el 15 %, mientras el 33 % de los casos afectó a la población LGBTI como conjunto.
En el plano institucional, el ranking anual de la homofobia y la transfobia ubicó en primer lugar a Carabineros de Chile, seguido por Gendarmería y la ultraconservadora Unión Demócrata Independiente (UDI), entre otros.
El informe destaca que el 2018 pasará a la historia como el año cuando más se discutió y debatió en el espacio público y privado sobre los derechos humanos de las personas trans, que trascendió las fronteras «en un proceso de visibilización y de conquista de derechos sin precedentes».
Sin embargo, el informe advierte que «tras una década de avances sistemáticos en materia de políticas públicas emprendidas desde el Poder Ejecutivo para la promoción de los derechos humanos de las personas LGBTI, a partir de marzo del 2018 hubo severos retrocesos y estancamientos».
«Lo más grave fue el silencio del Ejecutivo frente a los abusos y atropellos, a veces cometidos por agentes estatales, contra las personas LGBTI, a un punto que ni siquiera en los asesinatos existieron condenas públicas y en relación a las torturas de Carabineros y Gendarmes, no se implementaron medidas para sancionar, ni para solidarizar con las víctimas», lamentó el estudio.
En 2018 el Poder Judicial terminó por consolidarse como el más progresista del Estado en materia de derechos humanos LGBTI, mientras la Contraloría General de la República se perfiló como una instancia que puede contribuir a resguardar los avances en derechos humanos LGBTI y a cumplir compromisos cuando estos se ajustan a las leyes, añadió la investigación.
Otros hitos favorables a los derechos LGBTI son el llamado del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, para que Chile legisle sobre el matrimonio igualitario y la celebración en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la primera audiencia temática sobre matrimonio igualitario.
A lo anterior se suma en 2018 la distribución en colegios y liceos de una circular y cuatro textos educativos con temática LGBTI y la promulgación de la Ley de Educación Superior, norma que garantiza la no discriminación, según el informe del Movilh.
