Un caso de presunta homofobia en el Mundial femenino ha sido denunciado por una de las afectadas, la exárbitro alemana Jutta Ehrmann.
JAVIER ROMANO. MARCA.- El Mundial femenino de balonmano ha sido pródigo en acontecimientos cuanto menos chocantes. Se retiró el sistema de control de gol por medio de vídeo una vez empezado el campeonato, tras un fallo en su manejo. Dos de los cinco miembros del Comité Ejecutivo de la Federación Internacional IHF dimitieron, sólo un mes después de celebrado su congreso. A su término se ha conocido lo que podría ser un caso de discriminación sexual.
En una entrevista a la televisión noruega tv2, la exárbitro alemana Jutta Ehrmann asegura que ella y la española Carmen Manchado fueron vetadas para ejercer en los partidos como delegadas de la IHF por su orientación sexual. Ehrmann es pareja de la entrenadora del Bayer Leverkusen Renate Wolf. Fue la primera mujer que dirigió partidos de la Bundesliga masculina y en el Mundial 2013 fue delegada de la IHF.
«Les pregunté. ¿Cuál es la razón? ¿He hecho algo mal o qué sucedió? ‘No, tenemos algunas personas muy tradicionales en la IHF, especialmente el presidente, y tienen un problema con su estilo de vida’, me dijeron», afirma Ehrmann, que atribuye la respuesta a un alto cargo de la IHF, presidida desde 2001 el egipcio Hassan Moustafa.
Fueron propuestas
El presidente de la Comisión de Árbitros, el alemán Manfred Prause carga la responsabilidad de la designación de oficiales al Comité Ejecutivo de la IHF, y no aporta ninguna razón para la exclusión de Ehrmann, en declaraciones a la agencia alemana DPA. Según ha podido saber MARCA, tanto Prause como el esloveno Leon Kalin, presidente hasta hace unos días de la Comisión de organización y competiciones -es uno de los dos miembros de la Ejecutiva que han dimitido- propusieron a Ehrmann y a Manchado como delegadas federativas en el Mundial recién finalizado, pero fueron eliminadas alegando ‘razones técnicas’.
La española, entrenadora, doctora por el INEF de Madrid y profesora universitaria, es la responsable de la parcela femenina en la Comisión de competiciones de la Federación Europea (EHF). Su cualificación está probada, como lo demuestra que fue la delegada en la final del Mundial 2013. También lo ha sido en las dos final four disputadas de la Liga de Campeones femenina. MARCA se puso en contacto con ella, pero declinó dar su versión sobre lo denunciado por su colega alemana.
Aunque no hay pruebas por escrito de que se trate de un caso de homofobia, puede traer consecuencias, porque Jutta Ehrmann ha pedido al Comité Olímpico Alemán proteste ante el COI.
