Pro Derechos Humanos señala en una nota que los hechos ocurrieron este pasado domingo, cuando el personal que trabaja en las instalaciones, que gestiona y explota la empresa Inacua, pidió a estas mujeres que se fueran con sus hijos por este motivo.
LA VANGUARDIA.- La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) afirma haber sido testigo de un «acto discriminatorio e islamófobo» en la piscina del Centro Deportivo Municipal Periodista Antonio Prieto de Granada, donde el personal instó a dos usuarias que llevaban un bañador de cuerpo completo a marcharse del recinto, un asunto que el Ayuntamiento investiga para, de confirmarse, tomar las medidas pertinentes.
Pro Derechos Humanos señala en una nota que los hechos ocurrieron este pasado domingo, cuando el personal que trabaja en las instalaciones, que gestiona y explota la empresa Inacua, pidió a estas mujeres que se fueran con sus hijos por este motivo.
Ante un hecho similar acaecido el pasado septiembre, el Ayuntamiento de Granada respondió que «no hay restricción normativa alguna para el uso de esta prenda en la normativa municipal ni en la de la concesionaria, por ello se debe readmitir y permitir que los usuarios que la lleven utilicen las instalaciones siempre que no haya otros criterios de seguridad o higiene que lo limiten».
La Asociación Pro Derechos Humanos ha exigido un «posicionamiento oficial» del Ayuntamiento ante esta situación y que garantice que no vuelva a ocurrir en piscinas municipales.
También reclama una disculpa de la empresa encargada de la gestión de la piscina a las usuarias «expulsadas», advirtiendo de que si volviera a ocurrir el Ayuntamiento «debería rescindirle el contrato».
Para APDHA «un ayuntamiento que está a punto de abrir un Observatorio sobre Delitos de Odio debería garantizar que no ocurran en sus dependencias y por parte del personal que depende de ellos».
EL AYUNTAMIENTO INVESTIGA
El Ayuntamiento de Granada trabaja, desde las delegaciones responsables de Derechos Sociales, y de Deportes, en la investigación de estos supuestos hechos, de los que ha tenido constancia a través de las redes sociales por usuarios de las instalaciones que los habrían presenciado, algunos de los cuales interpondrán reclamaciones a la empresa que presta el servicio.
Así lo ha explicado, en declaraciones a Europa Press, la concejal de Derechos Sociales, Educación y Accesibilidad de Granada, Jemi Sánchez, quien ha recordado que el Consistorio está «en contra de cualquier acto que pueda generar odio o islamofobia» y que permite el uso de estos bañadores tipo ‘burkini’ en sus instalaciones deportivas.
En contacto con los usuarios que han tenido conocimiento del asunto, y con la empresa, de confirmarse los hechos, se trataría de un «un asunto muy grave», sobre el que se tomarán medidas, ha agregado Sánchez.