ABC.- Un vecino de Huelva ha denunciado en redes sociales y ante la Policía Nacional haber sido objeto de una paliza a manos de un individuo (que lo conocía) después dirigirse a él con gritos de «maricón, sidoso«.
«Soy gay y ese es el motivo de lo que ha sucedido hoy», ha manifestado la víctima en redes sociales, donde explica que se cruzó con el presunto agresor camino de su casa y comenzó a insultarle desde el otro lado de la calle.
En un principio, según relata, el ya detenido le dijo que se cruzara pero finalmente fue él quien se dirigió a la víctima y, al llegar a su altura, le dio una patada en el pecho que «me tiró al suelo». Había otros dos hombres con el presunto agresor que, según la víctima, no hicieron nada por evitar lo que sucedió.
«Aprovechó para darme donde pudo y quiso…fue todo muy rápido». Ante el golpe, el móvil y las gafas cayeron al suelo, y el individuo los rompió al pisarlos para después, quitarle la cartera e irse del lugar.
Ante la caída, el móvil acabó en el suelo y el detenido lo pisoteó y rompió, añade, al igual que las gafas de sol, y posteriormente le quitó la cartera y se la llevó.
Fuentes de Policía Nacional, han confirmado a ABC que el presunto agresor se encuentra en dependencias policiales tras ser detenido como presunto autor de un robo con violencia y que será el juzgado – ante el que pasará en las próximas horas- el que determine si existe un posible delito de odio.
«Ha sido un motivo personal y homófobo. Tengo una sensación desgarradora y decepcionante por una indiferencia brutal a mi persona por ser gay», ha manifestado en redes la víctima, tras agradecer la ayuda de la Policía y de varias personas.
Pintadas en San Juan del Puerto
Por otra parte un murete pintado con el arco iris en San Juan del Puerto amanece con pintadas de ‘enfermos’ y ‘maricones’ días después de su decoración en la entrada del Parque V Centenario de San Juan del Puerto, donde se ubica el recinto ferial, junto al patio infantil del colegio público JJ Rebollo.
El acto vandálico, cuya autoría se desconoce, están prohibidas en el artículo 5º de la ordenanza municipal reguladora de la protección de bienes públicos de titularidad municipal y de mantenimiento de la convivencia ciudadana y que están consideradas como infracción grave y que conllevan una sanción de 750 euros, informo el Ayuntamiento.