La víctima y su familia sufrieron amenazas e injurias por motivos ideológicos durante casi dos años, según informa la Policía Nacional en un comunicado
LANZA.- Agentes de Policía Nacional, adscritos a la Comisaría Provincial de Ciudad Real, han detenido a cuatro personas como presuntas autoras de un delito continuado de odio, contra la libertad y el honor, por amenazar, acosar e injuriar a otra persona por motivos ideológicos.
Según el comunicado, la investigación policial se inició el pasado mes de mayo, a raíz de la denuncia de un vecino de Miguelturra en la que manifestaba ante la Policía Nacional que varias personas le amenazaban, acosaban e injuriaban debido a su diferente ideología política.
Esta persona, que ya había denunciado hechos similares hasta en cuatro ocasiones anteriores en los años 2018 y 2019, fue increpado e insultado por los autores de los hechos cuando se encontraba con su familia en la vía pública. Igualmente, la víctima manifestó que estas personas habían extendido los insultos, las amenazas y el acoso al resto de su familia.
Según las pesquisas policiales, se pudo averiguar que los presuntos autores amenazaron y acosaron de forma continuada al denunciante y su familia durante casi dos años, motivo por el que han sido detenidos como presuntos responsables de un delito de odio.
Tal y como establece el Plan de Acción contra los Delitos de Odio de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, “la aplicación del principio de igualdad de trato y la eliminación de toda clase de discriminación es un elemento estratégico esencial para el perfeccionamiento de la calidad democrática, el crecimiento económico y el desarrollo sostenible del conjunto de la sociedad”, recuerda la Policía Nacional en su comunicado.
Cómo identificar el delito
Asimismo, la Policía explica cómo identificar y denunciar un delito de odio: si una persona se muestra hostil por motivos de raza, orientación e identidad sexual, religión, creencias o discapacidad, puede estar cometiendo un delito de odio.
En este sentido, destacan que “no se debe permanecer indiferente ante los delitos de odio. Es recomendable denunciarlos lo antes posible” y añade que “los insultos racistas o xenófobos también pueden ser delito”.
“No se deben obviar los mensajes u ofensas recibidas a través de redes sociales, correo electrónico o teléfono móvil”, continúa la Policía, que precisa que “a la hora de formular la denuncia hay que expresar las palabras concretas y comentarios dichos por el autor”.
También insiste en poner en conocimiento de la Policía todo aquello que pueda parecer importante (símbolos, anagramas, tatuajes, vestimenta del autor, testigos de los hechos, etc.).