Cadena Ser.- La Audiencia de Bizkaia ha condenado a 7 años y medio de prisión a Nelson David, el joven colombiano de 25 años sospechoso de matar en 2021 a varios hombres con los que contactaba a través de una aplicación de citas para personas homosexuales, tras el primer juicio contra él por el intento de homicidio de otro hombre. Finalmente, la pena impuesta por el tribunal es inferior a los 9 años que solicitaba el fiscal y se sitúa muy por debajo de los casi 18 años que pedía la acusación popular en nombre de la asociación Gehitu, que consideraba que había que añadir el agravante de homofobia.
La sentencia resultante de este primer juicio celebrado en octubre le considera responsable de una tentativa de homicidio y, además de la pena de la pena de cárcel, le prohíbe acercarse a la víctima a una distancia inferior de 500 metros y le impone una indemnización de 10.800 euros por lesiones y daños morales. Tras estimar verosímil la declaración de la víctima y a la vista de las pruebas aportadas durante el juicio, la Sala considera que las acciones ejercidas por el ahora condenado fueron “potencialmente aptas para haber causado la muerte de la víctima”.
Sin alevosía
Sin embargo, la Audiencia no aprecia que exista alevosía para calificar el hecho de asesinato porque “resulta evidente que la víctima no tuvo imposibilidad de defenderse”. También rechaza la agravante solicitada por la acusación popular de haber cometido el hecho con motivación discriminatoria por la orientación o identidad sexual de la víctima.
Es el primer juicio al que se ha enfrentado Nelson David, pero no va a ser el último ya que durante el transcurso de la vista, la ertzaintza le relacionó con hasta siete homicidios consumados y dos en grado de tentativa, todos ellos con víctimas contactadas a través de una web de citas para homosexuales y relacionados con el robo de tarjetas bancarias para la posterior extracción del dinero de las víctimas como móvil.
Según recoge la sentencia, la Sala matiza que no ha tenido en cuenta para esta condena las investigaciones policiales que se siguen frente al procesado como “sospechoso respecto a otros episodios de indiciaria naturaleza delictiva con aparentes similitudes en la dinámica comisiva”, al no constar que haya “resolución definitiva firme en ninguna de las causas judiciales incoadas” contra él.