El País.- La sentencia impone a otros dos encausados por el crimen, ocurrido en 2019 en Oviedo, una multa de 7 meses y 15 días por omisión del deber de socorro.
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Oviedo ha condenado a 12 años de prisión por un delito de homicidio doloso a Jorge C. C., principal acusado de provocar la muerte de David Carragal tras propinarle una patada en la cabeza durante unas fiestas populares en 2019. La sentencia ha condenado también a los otros dos acusados a una multa de 7 meses y 15 días, con una cuota diaria de 10 euros, por omisión del deber de socorro, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Asturias.
En el transcurso del juicio, celebrado con un jurado popular, la Fiscalía amplió de 11 a 15 años la petición de cárcel tras no contemplar atenuantes. La defensa esgrimía dos posibles: confesión y reparación económica del daño —el ahora condenado ingresó 20.000 euros a la familia de la víctima como indemnización— y pedía que se le atribuyese un delito de lesiones con resultado de muerte. Para los otros dos acusados, sus defensas habían pedido la absolución, mientras que la Fiscalía no presentó acusación contra ellos. La resolución, que no es firme, puede ser recurrida en apelación ante la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Asturias.
Los hechos juzgados se remontan a la madrugada del 11 de junio de 2019, cuando la víctima, David Carragal, maestro de 33 años, esperaba un taxi junto a dos amigas en el barrio de La Florida. El acusado, nacido en el año 2000, y otros dos individuos, que también habían estado en los festejos del barrio, se acercaron a ellos y les pidieron fuego y tabaco. Después de responderles que no tenían, las dos jóvenes que iban con Carragal se apartaron y comenzaron a cruzar la calle, mientras que él mantenía una conversación con el acusado y sus acompañantes, cuyo contenido no se ha determinado, pero que no consta que fuera desafiante.
Entonces, el acusado propinó al fallecido con su pierna izquierda una fuerte patada en la parte derecha de la cabeza, que le hizo caer de espaldas semiinconsciente y a plomo, y golpearse violentamente contra el suelo. Inmediatamente, el acusado y sus acompañantes huyeron corriendo. La víctima quedó en coma y, tras pasar seis días en la UCI por la fractura craneal, falleció por muerte cerebral.
