EL SOL DE MÉXICO.- La asociación civil Letra S Sida, Cultura y Vida Cotidiana registró, de enero de 2014 a diciembre de 2016, 202 personas lésbico, gay, bisexual y transexual (LGBT) o percibidas como tales asesinadas en el país, presuntamente por la orientación sexual o la identidad o expresión de género.
Se trata de 67 asesinatos por año, alrededor de seis al mes, y en 2016 se registró la cifra más alta con 76 víctimas, según el más reciente reporte de esa organización.
Del total de asesinatos, 108 fueron mujeres trans (travestis, transgénero y transexuales), 93 hombres gays u homosexuales y una mujer lesbiana.
“Las mujeres trans son las más expuestas a este tipo de violencia letal. Es la primera vez que el número de mujeres trans asesinadas supera al número de gays en nuestro registro”, asentó el reporte. Además los patrones de violencia se dan en función de la identidad sexual y de género de las víctimas.
La mayoría de los cuerpos de los hombres homosexuales fueron encontrados en sus domicilios con múltiples heridas provocadas por objetos punzocortantes o asfixiados, mientras que los cuerpos de las mujeres trans fueron encontrados en la vía pública o en lotes baldíos con heridas provocadas por armas de fuego.
Además el promedio de edad de las víctimas gay u homosexuales es mayor, 36 años, al del promedio de las mujeres trans, 22. Y 33 de los cuerpos de las víctimas presentaban signos de tortura antes de ser ultimadas, mientras que 15 presentaban signos de violencia sexual.
Los autores del reporte reconocen que las cifras están subreportadas y que “podrían ser mayores”, ya que el ensañamiento con los cuerpos de las víctimas LGBT es uno de los elementos que distinguen a los crímenes motivados por el odio o el prejuicio, a diferencia de los homicidios simples.
Por entidades Veracruz, México, Quintana Roo y Chihuahua concentran la tercera parte del total de asesinatos: Veracruz con 22, Estado de México y Quintana Roo con 15, respectivamente, y Chihuahua con 14.
En la Ciudad de México el recuento es de ocho asesinatos presuntamente motivados por el odio o el prejuicio en los últimos tres años: dos en 2014, uno en 2015 y cinco en 2016.
Asimismo se identificó seis activistas defensores de derechos humanos, tres migrantes mujeres trans de Centroamérica (Guatemala y Honduras) y seis hombres gay o percibidos como homosexuales con Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Sin embargo, se desconoce si estas características diferenciales fueron determinantes en la comisión del delito
De acuerdo con el informe, únicamente fueron identificados 64 posibles responsables de estos ilícitos. Lo que equivale a la tercera parte del total de asesinatos.
Algunos de ellos contaban con antecedentes penales, se trata de delincuentes comunes o incluso bandas dedicadas al robo que seleccionan a hombres gay u homosexuales como víctimas de sus delitos.
En el modus operandi seguido por estos delincuentes fingen interés sexual u erótico para atraer a sus víctimas y someterlas fácilmente.
Lo hacen en lugares frecuentados por gays o incluso utilizan los chats de contactos.
Según los autores del reporte, este es uno de los hallazgos observados que, por lo regular, pasa desapercibido por los agentes de investigación, desestimando el prejuicio que subyace en la selección de la víctima y la saña utilizada en la comisión del crimen.
En cuanto a las líneas de investigación seguidas por los Ministerios Públicos, sólo en 17 casos se consideró al crimen de odio como la principal línea a seguir.