La publicación en el periódico Tylko Polska de una guía que parece sacada de los peores años del nazismo ha provocado un escándalo en el país, donde la llegada al poder del partido Ley y Justicia provocó un auge de la ultraderecha y el nacionalismo
INFOBAE.- Un semanario polaco de extrema derecha publicó un artículo en primera plana ofreciendo una guía «para reconocer a un judío» y llamando a «derrotarlos» porque «¡esto no puede seguir así!», según reportó este jueves la agencia de noticias JTA, lo que ha provocado un escándalo ya que la publicación estaba a la venta dentro del parlamento de Polonia.
Se trata de Tylko Polska (Sólo Polonia), una publicación semanal que tiene distribución en todo el país y defiende numerosas causas antisemitas y ultra derechistas. Está dirigida por Leszek Bubel, un nacionalista y candidato político marginal que se hizo conocido por cantar una canción sobre rabinos «rabiosos».
El artículo en cuestión, presentado en portada, ofrece una lista que parece sacada de los años más oscuros del nazismo y su periódico insignia Völkische Beobachter, ya que cita «nombres, rasgos antropológicos, expresiones, apariencias, características de la personalidad, métodos operativos y actividades de desinformación» que serían propias de personas judías, de acuerdo al reporte de la Jewish Telegraphic Agency (JTA)
Un semanario polaco de extrema derecha publicó un artículo en primera plana ofreciendo una guía «para reconocer a un judío» y llamando a «derrotarlos» porque «¡esto no puede seguir así!», según reportó este jueves la agencia de noticias JTA, lo que ha provocado un escándalo ya que la publicación estaba a la venta dentro del parlamento de Polonia.
Se trata de Tylko Polska (Sólo Polonia), una publicación semanal que tiene distribución en todo el país y defiende numerosas causas antisemitas y ultra derechistas. Está dirigida por Leszek Bubel, un nacionalista y candidato político marginal que se hizo conocido por cantar una canción sobre rabinos «rabiosos».
El artículo en cuestión, presentado en portada, ofrece una lista que parece sacada de los años más oscuros del nazismo y su periódico insignia Völkische Beobachter, ya que cita «nombres, rasgos antropológicos, expresiones, apariencias, características de la personalidad, métodos operativos y actividades de desinformación» que serían propias de personas judías, de acuerdo al reporte de la Jewish Telegraphic Agency (JTA)
Por si esto fuera poco, el texto se pregunta «¿cómo derrotarlos?» y expresa que «¡ésto no puede seguir así!».
Además de este agresivo artículo, la actual edición de Tylko Polska que salió a las calles el miércoles presenta un texto sobre el «ataque a Polonia en la conferencia de París», en referencia a una conferencia de Estudios sobre el Holocausto realizada el mes pasado a la que ultranacionalistas acusaron de ser anti polaca.
Acompañando al texto publicaron una foto de Jan Gross, un académico polacoestadounidense de la Universidad de Princeton, en Estados Unidos, dedicado al estudio de la complicidad de Polonia en el Holocausto.
Gross, quien junto a muchos otros académicos e historiadores sostiene que numerosos polacos colaboraron con los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, suele ser blanco de críticas de parte de nacionalistas.
Los ataques hacia el académico no han quedado, sin embargo, en las vociferaciones de extremistas. El partido nacionalista y conservador Ley y Justicia (PiS), actualmente en el poder, consideró en 2016 retirarle la Orden del Mérito de la República de Polonia que se le otorgó en 1996, aunque luego desistió.
De hecho, el PiS del primer ministro Mateusz Morawiecki ha encarado numerosos ataques contra quienes apenas hablen del colaboracionismo polaco con las tropas de ocupación nazi entre 1939 y 1945.
Y el año pasado se aprobó una polémica ley para penar con multas y hasta tres años de prisión a quienes «contrariamente a los hechos» sostengan públicamente que el país tuvo un rol en el Holocausto, según explicó el gobierno de Varsovia en aquel entonces.
Específicamente, el gobierno se ha puesto detrás de la campaña para prohibir el uso del término «campo de exterminio polaco» para referirse a las instalaciones montadas por los nazis en Polonia, como Auschwitz-Birkenau y Treblinka, y enjuiciar a quienes lo utilicen.
En los pasillos del Sejm
Tal es la penetración de Tylko Polska en la Polonia del PiS que la publicación llegó incluso a los puestos de venta dentro del Sejm, la cámara baja del Parlamento de Polonia. Al respecto y luego de que esto fuera detectado y difundido en redes sociales, el director de información del órgano, Andrzej Grzegrzolka, aseguró que pedirá que los ejemplares sean retirados de los kioscos, aunque no tiene autoridad para prohibirles la venta de determinados periódicos, de acuerdo a The Independent.
Michał Kamiński, un legislador del partido conservador Polonia Primero (PJN), fue uno de los primeros en protestar la presencia de la publicación en el parlamento, según indicó Polsat News. «Es un escándalo absoluto, textos sucios, como salidos de periódicos nazis y vendidos en el parlamento», dijo.
También existía la posibilidad de que la justicia suspenda a Tylko Polska por su lenguaje de odio motivado por raza y religión, lo que la ley polaca prohíbe.