El juicio no se ha llegado a celebrar porque Alexandre Bissonnette se ha declarado culpable de haber asesinado a seis personas y herido a seis más el 29 de enero de 2017
JAIME PORRAS FERREYRA. EL PAÍS.- Uno de los juicios más esperados en la historia de Canadá finalmente no se llevará a cabo. La mañana de este miércoles, Alexandre Bissonnette se declaró culpable de las 12 acusaciones presentadas en su contra por los hechos sucedidos el 29 de enero de 2017 en la mezquita de la ciudad de Quebec. Ese día, Bissonnette, entonces de 27 años, ingresó al recinto religioso con un arma de fuego, asesinó a seis personas e hirió a seis más. Con su admisión de culpa, fue condenado automáticamente a cadena perpetua y deberán pasar al menos 25 años antes de que pueda solicitar la liberación condicional.
De acuerdo con Radio-Canadá, el acusado se dirigió al juez François Huot en una sala del Palacio de justicia de Quebec para explicar por qué reconoció su culpabilidad: “Es una decisión que tomé para evitar que las víctimas y sus familias tengan que volver a vivir esta tragedia”. La fiscalía tiene la posibilidad de pedir que las penas por cada delito sean acumulativas.
La decisión de Bissonnette causó sorpresa, ya que este lunes por la mañana el acusado se había declarado no culpable a los 12 cargos en su contra. No obstante, tras una pausa ordenada por el juez Huot, cambió de parecer. Huot preguntó a Bissonnette si comprendía el impacto de esta nueva decisión. El acusado asintió. El juez impuso una prohibición para que los medios no publicaran aún la declaración de culpabilidad y solicitó que el joven se sometiera a una evaluación sobre su estado mental. Este miércoles, el psiquiatra a cargo de esta tarea confirmó que el acusado entendía cabalmente las consecuencias de su declaración. Así, el juez Huot leyó de nueva cuenta cada uno de los cargos y Bissonnette pronunció la palabra culpable en 12 ocasiones.
En la sala se encontraban varios familiares de las víctimas, líderes de la comunidad musulmana de Quebec y los padres de Bissonnette. “Siento vergüenza por lo que hice. Quisiera pedirles perdón por todo el daño que les he hecho, pero sé que mi gesto es imperdonable”, declaró el autor de la masacre. Alexandre Bissonnette cursaba estudios en ciencia política en la Universidad Laval y no contaba con antecedentes penales cuando perpetró su ataque. Sin embargo, poco tiempo después fueron apareciendo detalles sobre su gusto por las armas de fuego y su admiración hacia grupos de extrema derecha.
El asalto sangriento perpetrado por Bissonnette en la mezquita de Quebec ha sido el primero a un centro religioso en la historia de Canadá. Tras la tragedia, Justin Trudeau, primer ministro canadiense, dijo que se trataba de un ataque contra la diversidad, la apertura y la libertad de religión, valores fundamentales en el país. “Al millón de musulmanes canadienses: esta es su casa”, afirmó Trudeau.