Aficionados y jugadores se liaron a golpes en la grada. Los insultos y las agresiones durante el encuentro provocaron la posterior refriega
SPORT.- Cada vez sorprenden menos, pero no por ello dejan de ser lamentables. Las agresiones a árbitros y peleas entre jugadores y aficionados se están convirtiendo en sucesos habituales en los campos de fútbol regional. La última trifulca de la que avergonzarse ocurrió en un encuentro de tercera catalana el pasado domingo 19 de febrero.
Los protagonistas de los hechos fueron el Can Roca, equipo de Castelldefels, y el Levante Las Planas, de Sant Joan Despí. El partido de ida ya fue tenso, y eso se notó durante los 90 minutos disputados en el Municipal de Can Vinader. Según cuentan algunos aficionados, las agresiones de los locales fueron constantes, un comportamiento que provocó los insultos de la grada visitante.
Una vez terminado el partido con victoria del Levante Las Planas (0-1), se desató la batalla. Algunos jugadores locales saltaron a la grada en busca de quienes les habían insultado. Ya no había marcha atrás. Un futbolista del Sant Joan Despí acudió a defender a su padre y se formó una pelea que se extendió por todo el tendido.
Las imágenes solo muestran una parte de lo que ocurrió en la grada, donde había varios puntos de conflicto. Minutos después, cuando el ambiente se había tranquilizado, llegó la Policía de Castelldefels.
