Las Provincias/Marc Escribano.+ Jugadores y aficionados locales golpearon a la conclusión de un encuentro de juveniles a miembros y padres del equipo de l’Eliana, con varias personas heridas.
La violencia no tiene cabida alguna en el mundo del fútbol. Nunca es la solución a los problemas. Pero este pasado sábado, el polideportivo de Manises vivió uno de esos episodios lamentables que desgraciadamente siguen sucediendo. Una «violentísima agresión» y según relatan los afectados se produjo por parte un grupo de jóvenes, que supuestamente eran tanto jugadores como aficionados del equipo Juvenil A del CF Sporting de Manises. Las víctimas fueron los integrantes y familiares del equipo de fútbol Juvenil B del CDFB l’Eliana.
LAS PROVINCIAS ha podido tener acceso a las denuncias presentadas ante la Policía y a los partes de lesiones de varios jugadores del l’Eliana. Esta agresión surgió tras la finalización de un partido que según los propios testigos, «no tuvo incidentes violentos reseñables» y que «en ningún momento se percibía tensión entre los jugadores».
Una vez finalizado el partido con resultado de 2-4 para los visitantes y ya en los vestuarios, los jugadores de l’Eliana presuntamiente recibieron amenazas por parte de algunos miembros del conjunto local. Esto provocó que «salieran del vestuario a medio cambiarse», con las prisas provocadas por querer abandonar el polideportivo para evitar enfrentamientos. Así lo relatan los mismos afectados, que afirman que en la puerta apareció uno de los jugadores del Manises montado en patinete. Este cortó el paso a uno de los jugadores de l’Eliana, al que comenzó a empujar según afirman los padres testigos.
Otro jugador de l’Eliana salió corriendo para evitar el enfrentamiento cuando varios aficionados locales corrieron para agredirle, cayendo al suelo en la puerta del recinto. Fue entonces cuando comenzaron presuntamente a agredirle entre varios, «dándole patadas y puñetazos en el suelo, con una violencia que no podíamos creer», según han comentado testigos de la agresión a LAS PROVINCIAS.
Varios de los padres intentaron separar la pelea. Según el relato de los afectados, uno de ellos logró sujetar a uno de los agresores, pero cayó derribado al suelo entre «cuatro o cinco chicos», al que acto seguido comenzaron a golpear, dándole patadas en la cabeza y en las costillas, hiriéndole en la nariz y los ojos. Según las mismas fuentes, los agresores sujetaron mientras tanto al hijo del padre agredido, golpeándole y diciéndole «que iba a ver cómo le daban entre todos una paliza a su padre».
Se realizaron varias llamadas al 112 para solicitar la presencia policial en el lugar. Varias madres fueron tiradas al suelo en los forcejeos y en cuanto pudieron separar la pelea, los agresores huyeron. «Duró unos diez minutos y por la escasa presencia de padres acompañantes no podíamos controlarlo. En ningun momento apareció nadie del polideportivo ni personal que pudiese garantizar la seguridad», dicen los testigos.
El propio árbitro del encuentro redactó un anexo en el acta al finalizar el encuentro, en el que afirmaba que «cuando me disponía a abandonar las instalaciones deportivas, observé en la puerta a varios efectivos de la Policía Local. Me comentaron que se desplazaron hasta el lugar por una posible agresión a los jugadores y aficionados visitantes por parte de algunos jugadores y aficionados locales. Lo que hago constar a los efectos oportunos».
En la entrada del polideportivo quedaron el delegado del Manises y su padre, los cuales se mostraron colaboradores en todo momento de cara a la identificación de los agresores y sus conocidos. LAS PROVINCIAS se ha puesto en contacto con el Sporting de Manises, que ha condenado los hechos y repudiado la violencia. «No vamos a permitir algo así, no nos gusta la violencia. Llamamos al presidente del l’Eliana pidiéndole disculpas. Vamos a reunirnos para hablar de lo sucedido y decidir si tenemos que expulsar a alguien del equipo», han señalado desde el club.
Se comenta que el origen de la pelea puede ser el partido previo disputado entre los mismos equipos en la primera vuelta del campeonato en el campo de l’Eliana. Al parecer, algunos jugadores del Manises aseguraron que habían sido objeto de insultos y burlas por parte de aficionados locales.
