20Minutos. – Asociaciones humanitarias y ciudadanas han homenajeado este viernes en València a las personas víctimas de crímenes de odio en un acto en el que han reivindicado una nueva Ley Integral de Protección Universal de la Víctimas que permita disponer de «más recursos, profesionales y fondos» para combatir «las actitudes y comportamientos violentos que han aumentado en los últimos años».
Así lo ha destacado el coordinador del Movimiento en la Comunitat Valenciana, Ángel Galán, quien ha considerado que esta norma debería abordar desde la prevención hasta la sanción y la asistencia a las víctimas de los delitos de odio.
Coincidiendo con el Día Europeo de las Víctimas de Crímenes de Odio, -instaurado hace ocho años por el Consejo de Europa para conmemorar las víctimas de la masacre en Oslo y Utoya en 2011-, han participado en el acto junto a Galán testimonios de delitos de odio, y representantes de la Federación de asociaciones gitanas Maranatha, Federación Autonómica de asociaciones gitanas (Faga) (antigitanismo), Asociación Internacional Mundo Solidario (Asim) (xenofobia), Calcsicova CV (serofobia), Comunidad Israelita de Valencia (antisemitismo), Unión de Comunidades Islámicas de Valencia (islamofobia), Asociación de Implantados Cloceares CV y Plena Inclusión (disfobia).
El coordinador del Movimiento Contra la Intolerancia en la Comunitat Valenciana ha denunciado que, «después de once años, la situación no es para tirar cohetes», ya que «se sigue atendiendo víctimas que tienen muchas dificultades para la denuncia, el amparo y la posterior protección».
En esta línea, Galán ha recalcado que hay que «seguir luchando y trabajando para promover el apoyo y la denuncia de las víctimas, para promover su protección y amparo, y también para que sigan tomando nota desde arriba con el fin de que antes de 2025 consiga salir en el Congreso una buena ley Integral de Protección de los Delitos y de Amparo y Protección de la víctima».
«Esto es lo que se necesita desde el principio de la democracia, y todavía no se ha hecho en más de 40 años, pese a las más de 100 víctimas reconocidas por crímenes de odio. Es hora de que se pongan en marcha para desarrollar una ley que permita actuar sobre todo tipo de odio y que permita la protección de las víctimas», ha subrayado.
En ese sentido, ha criticado que «no hay suficientes profesionales ni suficientes recursos para atender la problemática», y, además, ha afeado que, pese «a las llamadas de solidaridad durante los meses más complicados de la pandemia», se han detectado que «los grados y las actitudes de violencia han aumentado y se han agravado hacia las personas más vulnerables y hacia aquellas que por su condición sean más potenciales de sufrir delitos de odio».
Dentro de este marco, Galán ha hecho hincapié que «durante 2021 se produjeron más de 100 delitos de odio en la Comunitat Valenciana». Según el último informe del Ministerio del Interior, la Comunitat es la cuarta con más delitos de este tipo en el conjunto del país, dentro de los cuales, destacan el racismo, la xenofobia, el odio ideológico y LGTB fobia, a los que siguen islamofobia, antisemitismo y antigitanismo.
Unos datos que ha calificado Galán de «muy preocupantes como para no seguir trabajando en este ámbito y como para no aumentar recursos y herramientas para hacer que el Plan Nacional de Delitos de Odio, que se está implementando desde hace cuatro años se refuerce en recursos y fondos para poder llegar a los que más lo necesitan, que son las víctimas».
GORDOFOBIA
Para ilustrar esta realidad, Carmen, una chica valenciana que se define como «gorda», ha explicado que en diferentes momentos de su vida la sociedad le ha demostrado «su rechazo» con muestras de asco, desprecio, burlas o miradas.
Ha calificado este tipo de comportamientos de «gordofobia» y ha señalado estos episodios se dan porque determinados «cuerpos por razón de peso o del espacio que ocupa, molesta y da asco a otra gente que necesita manifestarlo». En este sentido, ha terminado su discurso con el ánimo de hacer «apología de la libertad para poder vivir una vida en plenitud».
Finalmente, el acto ha terminado con un encendido de velas por cada una de las asociaciones allí presentes y con un emotivo minuto de silencio por las más 100 víctimas mortales notificadas por delitos de odio en España desde que hay registros.