Público.- Se trata del primer ataque a un joven gay registrado por el Observatori contra l’Homofobia de Catalunya en el transporte público. Ocurrió en enero de 2019 y tres acusados se enfrentan a cinco años de prisión por la paliza que infligieron al joven, previamente increpado por ser homosexual.
El juicio contra tres chicos acusados de un delito de lesiones con la agravante de homofobia por la paliza que propinaron a un joven gay en el metro de Barcelona, en enero de 2019, se celebra este miércoles en la Ciudad de la Justicia de Barcelona en medio de mucha expectación. Los acusados, sin antecedentes, no han querido declarar hasta ahora. Un joven menor de edad que también participó en los hechos fue juzgado hace unos meses y llegó a una conformidad con la Fiscalía, reconociendo la agresión homófoba y aceptando una condena de 20 meses.
Los hechos ocurrieron un sábado a las seis de la mañana, cuando la víctima entraba en el metro en la estación de Urquinaona. Se dirigía a su trabajo. En el vagón un grupo de jóvenes le recibió con miradas de odio. Uno de ellos le increpó y le ridiculizó sobre su condición sexual. El resto se unió a la mofa. En un momento dado, ante la interpelación de los chavales, la víctima reconoció que era gay.
A continuación se apeó del vagón, seguido por los agresores. En el andén, una patada por la espalda le derribó. Ya en el suelo, la víctima recibió puntapiés y patadas de los cuatro agresores. Uno de ellos le acertó en el ojo izquierdo, provocándole una brecha importante justo debajo del párpado. La llegada de los vigilantes de seguridad del suburbano barcelonés impidió que la paliza continuara.
El juicio de este miércoles es crucial porque representa «un antes y un después» en el camino que deben recorrer estas agresiones hasta llegar a ser enjuiciadas, según opina la letrada Laia Serra, representante del joven agredido: «Tenemos en este caso a una fiscalía que se ha involucrado, al Ayuntamiento de Barcelona y a la Generalitat que se han personado como acusación popular. La víctima se siente arropada, sabiendo que las instituciones están a su lado, que es como debería ser en todos los casos».
La Fiscalía de Barcelona pide cinco años de prisión para cada uno de los tres encausados por un delito agravado de lesiones, por la alevosía al haber sido interceptado por la espalda, con la agravante de homofobia. «Estamos ante un caso de delito de odio que puede probarse absolutamente –declara Laia Serra–. El problema es en estos casos que muchas veces no puede demostrarse con facilidad el móvil discriminatorio. Pero en el caso que nos ocupa, además de estar grabados los hechos por las cámaras del metro, ya hay una conformidad, la del acusado menor de edad, que reconoció la agresión homófoba».
Las lesiones de la víctima, además de las de componente psicológico, fueron hematomas por diversas partes del cuerpo, además de la brecha debajo del ojo.
El móvil de la homofobia está en el centro de este juicio. Eugeni Rodríguez, presidente del Observatori contra l’Homofobia, que ha presentado un protocolo contra las agresiones LGTBIfóbicas en el metro de Barcelona, comenta a Público su satisfacción por haber ayudado a llevar el caso a la fase del juicio. Fue la primera agresión homófoba que su asociación computó como ocurrida en el transporte público en Barcelona. «Un espacio que debería ser completamente seguro para las personas LGTBI», dice Rodríguez, que añade que en este caso «han funcionado todos los resortes. Esperamos una condena que repare el daño causado a la víctima».
Meses después de esta agresión, se produjo otra en el metro de Barcelona de cariz lesbófobo. Una chica insultó y vejó a una pareja de mujeres que se había besado en público. En el juicio, celebrado en abril de 2021, la acusada reconoció los hechos y aceptó una condena de seis meses, sustituible por una multa y un cursillo de Derechos Humanos. La Fiscalía la acusaba de un delito de odio y otro de lesiones leves.
Los informes anuales del Observatori contra l’Homofobia, que se elaboran desde 2014, han detectado que la lesbofobia es «la opresión menos registrada, con aproximadamente un 12 % del total de todas las incidencias recibidas en estos últimos años».
Según datos del Observatori, las denuncias por agresiones contra el colectivo LGTBI han aumentado un 25% en Catalunya en 2020 respecto a 2019. La entidad recibió un total de 189 denuncias por discriminación. Los incidentes registrados desde 2014 ascienden a 1.085 en la comunidad.