ABC.- Antoviolencia ha propuesto una sanción grave de 3.001 euros para cada uno de los 86 ultras de grupos violentos de Betis y Osasuna identificados por participar en una reyerta callejera en la que provocaron una brutal pelea por las calles de Sevilla, con motivo del encuentro entre el conjunto andaluz y el navarro. Según confirma el Ministerio del Interior, «ambos grupos ultras utilizaron palos de madera, barras de metal, petardos y cohetes, entre otros objetos contundentes generando con ello una grave alteración de la seguridad ciudadana».
Además, al castigo económico se añadiría la prohibición de acceso a los recintos deportivos por un período de seis meses.
A pesar de que el partido no había sido declarado de alto riesgo por la ausencia de antecedentes conflictivos, el pasado 29 de octubre confluyeron en la ciudad hispalense más de medio centenar de radicales de Osasuna que, horas antes del partido, se encontraron con otros tantos del equipo bético y emprendieron una batalla campal en la que se detectó la presencia de cohetes, palos de madera y otros objetos contundentes.
Un ultra del Betis recibió una severa paliza una vez había ya caído inconsciente en la acera. Tuvo que ser trasladado al hospital con varios traumatismos.
La investigación se prologó durante varios meses para poder identificar a todos los participantes para los que pide ahora 3.001 euros para cada uno. Durante la intervención policial, fueron detenidos 58 miembros del grupo ultra ‘Indar Gorri’ a los que se les imputaron sendos delitos de desórdenes públicos, riña tumultuaria, pertenencia a grupo criminal y lesiones, además de otros miembros retenidos en Sevilla y Madrid.