En el comunicado emitido por la coalición formada por el bloque conservador de Merkel y los socialdemócratas se menciona la cifra de entre 1.000 y 1.500 niños
EFE. EL MUNDO.- El Gobierno alemán acordó acoger a «un número limitado» de los menores que hay refugiados en campamentos de Grecia, como parte de una «solución humanitaria» y compartida de forma «voluntaria» entre socios de la Unión Europea (UE).
El acuerdo fue adoptado en una reunión de la coalición entre el bloque conservador de la canciller Angela Merkel y sus socios socialdemócratas, que se prolongó hasta la madrugada de este lunes.
Tanto la líder de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Annegret Kramp-Karrenbauer, como la copresidenta del Partido Socialdemócrata (SPD), Saskia Esken, expresaron su satisfacción por el acuerdo alcanzado, en declaraciones a la televisión pública ZDF.
La decisión contempla, según el comunicado emitido al término de la reunión, «apoyar a Grecia» ante el gran desafío que supone para ese país la acogida en su territorio de refugiados y se menciona la cifra de entre 1.000 y 1.500 niños como posible colaboración.
De acuerdo con el documento, los menores a los que se acogería son niños no acompañados, de hasta 14 años, preferentemente niñas, o que sufran alguna enfermedad que merezca atención urgente.
«El orden y la humanidad son dos aspectos que deben ir de la mano», apunta el comunicado, donde se insiste en que la solución para los refugiados debe adoptarse «a escala europea» y en el formato de una «coalición voluntaria» entre países dispuestos a organizarla.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, viaja este lunes a Bruselas para entrevistarse con los principales dirigentes de la UE y abordar la situación en la frontera entre Turquía y Grecia.
TENSIÓN EN LA COALICIÓN DE GOBIERNO
Especialmente el SPD había reclamado la semana anterior una solución para los menores refugiados en las islas griegas. Desde la CDU se había insistido en que no puede repetirse una situación como la vivida en 2015, en que Alemania recibió un millón de refugiados, tras decidir Merkel mantener abiertas las fronteras cuando otros países europeos las habían cerrado.
La canciller se vio entonces sometida a fuertes presiones internas, tanto desde el ala más derechista de su CDU y como de su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), que pusieron en jaque su coalición.
Hasta 140 ciudades alemanas se ofrecieron la semana pasada, en una carta abierta dirigida al Gobierno, a acoger refugiados ante la escalada de la crisis en la frontera turco-griega.
El Parlamento federal (Bundestag) había rechazado unos días antes una propuesta de Los Verdes para que Alemania acogiese a 5.000 menores de los campos de refugiados griegos.