La Vanguardia.- El rescate este lunes de 13 inmigrantes hallados a la deriva en una lancha neumática al sur de las Islas Canarias ha dejado al descubierto una nueva tragedia en esta ruta de la inmigración ilegal: la desaparición de al menos 28 personas, ahogadas después de que un golpe de mar los lanzara al agua.
Los inmigrantes llevaban cuatro días en el mar cuando este lunes fueron avistados por un avión 120 kilómetros al sur de la isla de Gran Canaria, indicando que la embarcación se encontraba en muy malas condiciones de flotabilidad, y contando a una docena de personas subidas a los flotantes laterales de la misma.
Los supervivientes, 12 adultos y un adolescente, todos ellos subsaharianos, fueron alcanzados en primer lugar por dos buques mercantes que se quedaron junto a la zodiac para resguardarla de las olas mientras llegaban los equipos de rescate, dos helicópteros de Salvamento Marítimo que fueron los que llevaron a cabo la extracción. Una vez en tierra firme, explicaron que a bordo de la lancha iban más de 40 personas, la mayor parte de los cuales murieron ahogados la noche antes del rescate a causa de un golpe de mar.
Este domingo, otros 44 emigrantes murieran al hundirse otra patera en la misma zona
La oenegé Caminando Fronteras ya había alertado de la presencia de esta neumática, que estaba en ruta a las Canarias junto con otra de la que no se tiene constancia, según informa Efe. Esta tragedia se produce apenas 24 horas después de que otros 44 emigrantes murieran al hundirse otra patera en la misma zona del Atlántico, en el entorno del Cabo Bojador, con doce supervivientes rescatados del mar por servicios de emergencia de Marruecos.
Alrededor de 4.400 personas desaparecieron en el mar en el 2021 en su intento de alcanzar las costas de España, según un grupo de seguimiento. Una cuarta parte de ellas lo hicieron en ruta hacia las Canarias, que según informa la Organización Mundial para las Migraciones (OIM), es una de las vías más mortíferas para las migraciones.
Más de 22.000 migrantes alcanzaron las costas de las Islas Canarias en 2021, después de que 23.271 lo hicieran en 2020. Si los datos de desaparecidos de la OIM se cruzan con los balances de llegadas de Frontex, se observa que el año pasado perdió la vida rumbo a Canarias una persona por cada 20,3 que llegaron a tierra (4,9 %, 1.109 sobre 22.504). Esa tasa duplica la mortalidad de las travesías del Mediterráneo, que asciende en conjunto a una víctima por cada 50,7 supervivientes (1,9 %, 2.048 sobre 103.989).