INFOBAE.- «Una vez más, me declaro inocente», reiteró este martes el ruandés Fabien Neretsé, acusado de participar en 1994 en el genocidio en su país, en su última intervención antes del fallo del tribunal que lo juzga en Bélgica.
«Nunca dejaré de repetirlo. Ni planifiqué, ni participé en este genocidio contra la población tutsi de mi país», agregó el acusado, un ex alto funcionario ruandés de etnia hutu.
Neretsé, de 71 años, se presentó así como uno de los «ruandeses que se encontraron en medio de esta tragedia, en fuego cruzado, y que intentaron salvar a los suyos».
El acusado, que negó cualquier pertenencia a una milicia o al partido único de entonces, realizó estas declaraciones en la última jornada del juicio en su contra por «crimen de genocidio».
El jurado se retiró este martes para deliberar. El veredicto sobre su culpabilidad se espera en los próximos días, antes de que el tribunal fije la eventual pena.
Neretsé enfrenta la cadena perpetua. La fiscalía federal belga pidió que sea condenado por «crimen de genocidio» y, de confirmarse, sería el primero en serlo por este cargo en Bélgica.
La justicia belga lo acusa de 13 asesinatos y de tres intentos de asesinato entre abril y julio de 1994 en Ruanda, donde, según la ONU, el genocidio costó la vida de al menos 800.000 personas, sobre todo tutsis.