El Comercio.- La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal, asentado en Oviedo y en Parla (Madrid), dedicado a la explotación de sexual de mujeres extranjeras con bajos recursos que captaba a través de las redes sociales. Hay cinco detenidos, uno de ellos en la ciudad, y los agentes han liberado a cinco víctimas en Oviedo y una más en Zaragoza.
Según informó el Cuerpo Nacional de Policía, la organización tenía como principal objetivo captar mujeres de origen sudamericano en situación de vulnerabilidad y precariedad económica. «A través del engaño», establecían un vínculo con ellas de manera gradual y «se ganaban su confianza». Dado este paso, los explotadores las ofrecían viajar fuera de sus países de origen para «ejercer la prostitución en condiciones muy ventajosas».
Picado el anzuelo, aterrizaban en España pero lejos de lo propuesto, las víctimas sucumbían a «un escenario de control estrecho», eran desposeídas de sus pasaportes y asumían directamente, obligadas, una deuda de cinco mil euros que debían saldar mediante el ejercicio de la prostitución en prostíbulos de Oviedo y de Madrid.
Gracias a la denuncia interpuesta por una de estas mujeres, la Policía Nacional ha logrado desarticular al grupo criminal. Detuvo a los dos principales cabecillas en la frontera de Irún cuando se disponían a abandonar España; mientras que otras tres personas han sido arrestadas en Oviedo, Parla y Castro Urdiales.
Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual. La Policía Nacional cuenta con la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial de este tipo de delitos, no quedando reflejada la llamada en la factura telefónica.
