Heraldo.- Las fuerzas y cuerpos de seguridad registraron un total de 374.737 ciberdelitos en 2022, un 22 % más que el año anterior, y nueve de cada diez fueron estafas, que se incrementaron en un 26 %, según el último Informe sobre Cibercriminalidad del Ministerio del Interior.
El balance, hecho público este viernes, confirma que se acelera el ritmo de crecimiento de este tipo de delitos, que en 2018 suponían el 7,5 % de toda la delincuencia y el año pasado eran ya el 16 %.
A mucha distancia de los fraudes informáticos se situaron las amenazas y coacciones cometidas a través de internet (15.982 casos, el 4,2 % del total), que se redujeron casi un 8 % respecto al ejercicio previo. También descendieron los delitos contra el honor, la propiedad industrial e intelectual y la interferencia de datos y en sistema (ciberataques).
Las infraestructuras críticas recibieron un total de 546 ciberataques, casi un 20 % menos que el año previo. Fueron sobre todo ataques contra los sistemas (60 %), seguidos de robos de información (21 %) y, en menor medida, fraudes, intrusiones y uso de malware.
A mucha distancia de los fraudes informáticos se situaron las amenazas y coacciones cometidas a través de internet (15.982 casos, el 4,2 % del total), que se redujeron casi un 8 % respecto al ejercicio previo. También descendieron los delitos contra el honor, la propiedad industrial e intelectual y la interferencia de datos y en sistema (ciberataques).
Las infraestructuras críticas recibieron un total de 546 ciberataques, casi un 20 % menos que el año previo. Fueron sobre todo ataques contra los sistemas (60 %), seguidos de robos de información (21 %) y, en menor medida, fraudes, intrusiones y uso de malware.
En total fueron detenidas o investigadas 15.097 personas, un 9,4 % más que en 2021. Bajó sin embargo ligeramente el porcentaje de delitos esclarecidos: solo el 14,6 % de los hechos conocidos.
El mes con más incidencias registradas fue septiembre y, por ámbito territorial, encabezan la lista de denuncias Cataluña y Madrid, que superan los 63.000 hechos en ambos casos. Les siguen Andalucía, con 56.900 infracciones, y la Comunidad Valenciana, con 34.000.
Los menores, víctimas de amenazas y delitos sexuales
El número de víctimas se disparó en 2022: 298.319 20 (un 24 % más), con prácticamente la misma presencia de hombres que de mujeres. La mayoría tenían entre 26 y 40 años.
El fraude informático es el principal delito en todas la franjas de edad, pero en el caso de los menores no se sigue ese patrón, ya que son más vulnerables a amenazas, coacciones y delitos sexuales.
El informe recoge casi 4.000 delitos con víctimas menores de edad (1.685 que afectaron a chicos y 2.238 a chicas). En 1.400 casos se trató de amenazas y coacciones y en 954, delitos sexuales.
Campañas y refuerzo presupuestario
El Ministerio del Interior lanzó en febrero una campaña de sensibilización antes el incremento progresivo de este tipo de delitos desde 2016 y destaca las decisiones operativas que se han adoptado para mejorar las capacidades y los recursos policiales destinados a prevenir y perseguir la cibercriminalidad.
Por primera vez, destaca Interior, la Secretaría de Estado de Seguridad ha contado con una dotación presupuestaria específica de 5 millones de euros para mejorar las capacidades tecnológicas de la Oficina de Coordinación de Ciberseguridad y de las unidades de Policía Nacional y Guardia Civil especializadas en la prevención y persecución de los ciberdelitos.