El Periódico de Aragón.- La Fiscalía de Menores de Zaragoza ha archivado el expediente contra uno de los menores acusados de delito de odio dados los insultos proferidos –«negros, ¡fuera de aquí»– hacia una familia de gambianos en el barrio de Miralbueno de Zaragoza así como también el intento de incendio del balcón de la vivienda. El ministerio fiscal lo hace dada la ininmputabilidad de este joven menor de 14 años, sin entrar a valorar si realmente existe esa supuesta infracción penal. Por el momento, se desconoce el veredicto de la Fiscalía con respecto al resto de investigados que, precisamente, también son menores de edad.
La citada resolución llega unos días después de que EL PERIÓDICO DE ARAGÓN se hiciera eco de la situación de esta familia, que ya se ha puesto en manos de Kiitika Abogados para judicializar la causa. El atestado policial elaborado por la Jefatura Superior de Policía de Aragón fue remitido directamente a la Fiscalía de Menores tras la denuncia interpuesta por la madre de la familia el pasado 23 de julio. Tras un mes sin noticias al respecto, el abogado defensor, Iván Aybar, conoció hace unos días la decisión judicial.
«No somos partidarios de que el asunto se cierre en falso porque, desde el punto de vista penal, hay que hablar de responsabilidad, ya que ha habido varios delitos. Hay que investigar y en el concepto de autoría entran muchas más personas de las que materialmente pueden haber aquellos trapos ardiendo para quemar la vivienda», señaló Aybar en declaraciones a este diario, aludiendo a esos familiares que «han alentado» a los investigados a cometer los ilícitos. «No se puede quedar en una chiquillada y, al menos, se tiene que investigar», insistió el letrado, quien recordó que se trataba de una situación que «no va contra los gambianos, va contra los negros».
Como consecuencia de la situación relatada, esta familia de gambianos decidió abandonar el edificio y se alojó en sendos pisos de familiares hasta que Zaragoza Vivienda les facilite un nuevo domicilio que, de momento, todavía no les ha llegado. «No era urgente porque ellos habían encontrado soluciones provisionales y en septiembre se tratará de encontrarles una vivienda», justificaron fuentes de Zaragoza Vivienda a este diario hace un par de semanas. «Es una huida, no una solución. Ahora mismo están refugiados y, por tanto, se debe busca runa solución urgentísima», finalizó el abogado de la familia.