El Periódico de Aragón.- Una operación policial llevada a cabo hace poco más de una semana en Zaragoza reveló que la implantación de una nueva banda latina en las calles: a los Dominican Don’t Play (DDP) y los Black Panther (BP) se sumaban Los Trinitarios. Tres miembros de esta organización fueron arrestados por tráfico de drogas y puestos en libertad. Desde ahora ya se sabe cuál es uno de los barrios en los que quieren implantarse: Valdespartera.
En la calle Ciudadano Kane han realizado varios grafitis con el sello propio de esta banda latina. Destaca el AD7, que significa Amor a Siete, siendo el número fetiche de los Trinitarios; y PP7, que es la evolución de Popote, uno de los sobrenombres con los que se identifican Los Trinitarios junto a Trinis o TNT. Otra de las pintadas que suelen realizar en las zonas o barrios en los que están implantados son 1844, 3NI y las palabras Patria o Casa Trap.
Con estas pinturas Los Trinitarios han decidido marcar a modo de aviso a sus rivales que esa zona es suya. El uso de grafitis o placazos, que es como les llaman los miembros de las bandas latinas, es algo propio de su subcultura. Es la forma de anunciar que ese parque, ese barrio o esa cancha de baloncesto es su territorio. Avisan a los integrantes de otras que no se acerquen por allí y si lo hacen hay carta blanca para la violencia.
Así ha ocurrido en otras ocasiones en los parques de La Granja, en el barrio de San José, donde están implantados los DDP desde sus inicios allá por el año 2009, y en el de Delicias, donde operan los Black Panther. El parque Bruil estuvo en discusión, si bien los DDP lo consideran conquistado.
Amor a tres
La huella de los DDP en las calles también es numérica. Usan la combinación 4.4.16, que hace referencia a las letras D, la cuarta del alfabeto, D y P, la decimosexta; además del número 3, y EOEEE (su grito de guerra antes de atacar a miembros de bandas rivales). También usan DD3, es decir, Amor a Tres, en referencia a los colores de la bandera dominicana y que es un símbolo de hermandad y comunidad, aunque a esta banda pertenezcan jóvenes de otras nacionalidades, incluso españoles.
Es en estos lugares donde los miembros de estas organizaciones criminales están presentes pues suelen vivir en las cercanías y trafican con drogas, que es la principal forma de financiación de las bandas, que reclutan a menores para desempeñar ese menudeo de drogas, aprovechando una legislación laxa.
Este tipo de códigos son analizados por las brigadas de Información de las diferentes jefaturas superiores de policía que también analizan las redes sociales en las que muestran su forma de vivir. El uso de hashtags como #d7 de los Trinitarios o #d3 de los DDP es habitual, así como el uso de corazones de colores. La nueva banda implantada usa el verde.
La pintada que más preocupa a los investigadores es cuando aparece la combinación 3030, que a ojos profanos no dice nada, pero que significa que se ha decretado una guerra entre bandas. Es un llamamiento a sacar los machetes para disputar el territorio.
Por ejemplo, en el último crimen de bandas ocurrido en Madrid, el asesinato de un joven de 15 años llamado William que tenía contactos con Los Trinitarios, su asesino gritó: «Fuck 7», otro de los lemas y de las pintadas favoritas de los DDP, sus rivales. Sucedió en Villaverde, un barrio donde hay varias zonas en disputa entre ambos.
Tanto el Cuerpo Nacional de Policía como la Local han aprehendido decenas de machetes y cuchillos en diferentes intervenciones. En la capital aragonesa se han venido realizando macrorredadas en parques y discotecas, que se unen a las labores de vigilancia, tanto en la calle como en las redes sociales, y a la prevención en los colegios e institutos por parte de Participación Ciudadana, dando charlas y consejos sobre los peligros que entraña acceder o pertenecer a estos grupos. Y es que los colegios y los parques suelen emplearlos para captar a los miembros.