Cadena SER.- El líder de la derecha alemana Friedrich Merz ha reconocido recientemente, en una entrevista para la cadena de televisión alemana ZDF, que la Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU) nunca negociaría con el partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AFD) de cara a las próximas elecciones. Todo ello a raíz de una encuesta publicada recientemente por el ARD-Deutschlandtrend en el que se da a conocer que, si las elecciones se celebraran este mismo domingo, el CDU saldría como la fuerza más votada por delante del Partido Socialdemócrata del canciller Olaf Scholz y del anteriormente citado AFD.
Según recoge dicha encuesta, la CDU recibiría un 29% de los votos en caso de que las elecciones se celebrasen este mismo fin de semana. De esta manera, la formación dirigida actualmente por Friedrich Merz se situaría en cabeza por delante tanto del Partido Socialdemócrata (SPD) como de Alternativa por Alemania (AfD), ambas con un 18% de los votos. A continuación destacan Los Verdes con un 15% de los votos, el Partido Liberal (FDP) con un 7% y La Izquierda con un 4%. Estos resultados, unido a la debacle tanto de los Verdes como del Partido Liberal (FDP), permitirían a Friedrich Merz liderar el país si contara con el apoyo de Alternativa para Alemania.
«Mientras yo sea líder de la CDU no habrá cooperación con la AfD»
En estados federados como el de Brandenburgo, por ejemplo, obtendría hasta el 23% de los votos. Un porcentaje que se dispararía hasta el 26% en Sajonia o incluso un 28% en Turingia. Unos datos cuanto menos reseñables teniendo en cuenta que estos tres estados federales elegirán nuevos parlamentos estatales el próximo año. Sin embargo, el líder de la derecha alemana ha reconocido durante esta entrevista para la televisión que nunca pactarían con una formación de extrema derecha como el AfD: «Mientras yo sea líder de la CDU no habrá cooperación con la AfD».
Todo ello porque, en declaraciones a la televisión alemana, no tienen nada que ver con las personas que defienden estas siglas: «Son xenófobos y antisemitas; no tenemos nada que ver con esta gente». Bajo el punto de vista de Merz, la culpa de que la ultraderecha haya crecido tanto en Alemania es del Tripartito formado por los socialdemócratas, Los Verdes y el Partido Liberal (FDP): «Si tuviéramos un gobierno que funciona bien técnica y políticamente, entonces la AfD no obtendría el 18 por ciento». Merz ha criticado principalmente el «paternalismo» de Los Verdes, lo que bajo su opinión ha llevado a la población alemana a decantarse por la fuerza de ultraderecha: «La gente está cansada y se desahoga».
Scholz y los partidos «del mal humor»
Por otro lado, el canciller Olaf Scholz (SPD) ha acusado el auge de los partidos populistas a la incertidumbre que vivimos como consecuencia un «momento convulso» en el que se están produciendo muchos problemas importantes al mismo tiempo. Desde la pandemia de la COVID-19 hasta la invasión rusa a Ucrania o el cambio climático. De ahí que hayan crecido los partidos que bajo su punto de vista son «del mal humor», entre los que destaca la AfD.
Mientras tanto, la presidenta de la AfD, Alice Weidel, critica las palabras de Scholz y asegura que el hecho de que la ciudadanía haya perdido el buen humor ha sido culpa únicamente suya: «Los ciudadanos han perdido la risa, pero eso no se debe a una AfD supuestamente malhumorada, sino a un grupo de teatro amateur que todos los días ofrece un triste cabaret político en el gabinete federal».
