Onda Cero/Marian Ruiz.- En 2022 se han denunciado 435 delitos de odio en Euskadi, dato que multiplica por cuatro los recogidos en 2019. Según el informe del Departamento de seguridad, que reconoce la subida exponencial de los últimos tres años, el incremento obedece a una mejor detección y a cambios legislativos. La mayoría de estos delitos corresponde a racismo o xenofobia.
El 52% de los delitos tiene carácter racista o xenófobo, lo que supone un total de 231 casos. Esto es algo habitual según recoge el informe, que en cualquier caso sí matiza que la incidencia es algo inferior al año anterior. Le siguen a distancia los que están relacionados con la orientación e identidad sexual, que son dos de cada diez. A mayor distancia, los delitos por el sexo o género por un lado, y por la ideología de la víctima, se han duplicado. «Han aumentado considerablemente, en mayor medida que el resto de colectivos’, indica el documento.
El doble de detenciones
Hablamos sobre todo de lesiones, pero también de amenazas y hasta agresiones sexuales. Ertzaintza y policías locales han imputado por estos casos a 246 personas. El 74% son españoles, de entre 13 y 84 años. También se ha detenido a 44 personas, duplicando esta cifra al año previo. Más de dos tercios de las detenciones son a personas extranjeras.