Última Hora/Tolo Jaume.- La tensión estalló tras el pitido final del partido disputado en el campo de rugby de Calvià que, al margen de la remontada visitante, se habría calentado en las redes sociales.
El fútbol sigue dejando episodios de violencia en Mallorca como el que se ha vivido este fin de semana en el encuentro que ha enfrentado al Son Caliu y al Platges de Calvià C en el campo de rugby de Calvià y que se ha saldado con un jugador con un tímpano roto tras las primeras exploraciones. El derbi ‘calvianer’ entre los dos equipos correspondiente a la decimosexta jornada de liga del grupo E de Primera Regional había discurrido con una tensión que estalló con el pitido final tras la victoria del equipo visitante y que se saldó con un jugador del equipo visitante con un tímpano roto.
La remontada del Platges de Calvià C, que dio la vuelta a un 2-0 inicial para acabar imponiéndose 2-3, llegó precedida de varias acciones duras en el tramo final del duelo. Algunas jugadas muy al límite del reglamento y una expulsión de un jugador del Son Caliu caldearon aún más el ambiente de un encuentro que, al parecer, ya habría tenido algunos piques previos a través de mensajes en las redes sociales. Tras el pitido final y mientras algunos participantes se encaraban, un jugador del Son Caliu propinó un puñetazo a uno del Platges de Calvià C tal como se puede apreciar en las imágenes del vídeo al que ha tenido acceso esta redacción y que relatan testigos presenciales.
Numerosos espectadores invadieron el terreno de juego. Mientras algunos trataban de calmar los ánimos, también los hubo que amedrentaron a los jugadores del Platges de Calvià C, que se recluyeron en los vestuarios mientras una veintena de individuos se reunieron junto a la caseta profiriendo insultos y lanzando amenazas. La situación propició la llamada a las fuerzas de seguridad, que acudieron al recinto deportivo para controlar la situación. En todo momento la directiva del Son Caliu medió para calmar los ánimos y estuvo a disposición del equipo visitante y, sobre todo del agredido, que habría sufrido una rotura de tímpano como consecuencia del puñetazo sufrido por parte de un adversario. Se optó por mantener a los jugadores de los dos equipos en los vestuarios para evitar problemas hasta que la policía se hizo cargo de la situación.