EMILIO LÓPEZ. WEBISLAM.- El 11 de septiembre del 2.001, se produjo el atentado de las Torres Gemelas en New York, que conmocionó el mundo. El 7 de octubre de ese mismo año se invadió Afganistán y posteriormente en el 20 de marzo del 2003 se invadió Iraq, por parte del Ejército de los Estados Unidos.
En el 2004, durante la bonanza económica que recorrió Europa, (con una tasa de paro minima), la cadena de radio BBC envió a 50 empresas los curriculum de diferentes personas que se identificaban cada una como británico, africano o musulmán. Los resultados fueron contundentes:
“Los blancos tenían un 25% de posibilidades de ser entrevistados mientras los negros tenían un 13% y los musulmanes solo un 9%”.
El 11 de marzo de 2004 estallaron diez mochilas cargadas con explosivo, en cuatro trenes de la Red de Cercanías de Madrid, ocasionando la muerte de 192 personas, y 1.858 heridos. El mayor acto de terrorismo en España y Europa Occidental fue llevado a cabo por una célula terrorista yihadista.
El barómetro de opinión pública del Real Instituto Elcano de junio de 2004 señalaba que el 80% de los encuestados tendían a considerar a cualquier persona que practique el islam como «autoritaria» y el 57% como «violenta».
La Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil, entre enero de 2004 y mayo de 2005, registró 30 agresiones que podrían describirse como «anti-musulmanas».
En el Informe “Musulmanes en la Unión Europea: Discriminación e Islamofobia, Extractos de los Informes del Observatorio Europeo del Racismo y la Xenofobia (Eumc)” de diciembre del 2.006, aparecía entre otras citas las siguientes:
“Es prácticamente imposible decir, “Soy alemán y soy musulmán”. Así que te ven como a un musulmán no entienden que seas alemán. No pueden comprenderlo. ¿Cómo es posible que sea alemana a pesar de ser musulmana?… Siempre piensan que estás muy lejos, que eres extraña, que eres algo diferente.” (Mujer, Alemania).
“Algunos católicos tradicionalistas pretenden presentar a los inmigrantes musulmanes como una nueva invasión, pues están convencidos de que los musulmanes están invadiendo España, la están conquistando. Quieren hacer creer que los inmigrantes son una nueva clase de invasión. Una parte muy pequeña de la sociedad comparte esta opinión…” (Varón, España).
El 1 de febrero del 2.005, apareció por primera vez el término Eurabia, en el libro The Euro-Arab Axis, de la periodista británica de origen egipcio Giselle Littman, cuyo seudónimo es Bat Ye’or. El termino se popularizó de la mano de la periodista y escritora Oriana Fallaci.
Eurabia es el término ampliamente utilizado por la extrema derecha islamófoba bajo el cual se difunde la teoría conspiranoica, según la cual en el futuro, como consecuencia de la tolerancia de los gobiernos europeos y de una mayor demografía de la población de origen inmigrante y musulmana, Europa occidental se convertirá en un continente de mayoría musulmana, donde se impondrá la Sharia en su versión más radical de la mano del salafismo wahabí.
El ideólogo más destacado de la extrema derecha española, Ernesto Mila, a través de su blog infokrisis.blogia.com, anunció en 13 de Abril de 2005, una futura “guerra civil, religiosa, racial y social”, en estos términos:
… Creen que la sociedad y la estructura económica del Estado Español podrán resistir la riada de la que solamente hemos vivido las primeras vanguardias. No es así: ni la sociedad española, ni la europea, ni la economía española podrán soportar el peso y las tensiones que suponen esta presencia masiva de ilegales. Y lo que es peor: estas comunidades, progresivamente fortalecidas en número, finalmente, decidirán que ellos tienen fuerza suficiente como para coger por su cuenta lo que el mercado del niega. Es a esto, a lo que llamamos “guerra civil, religiosa, racial y social”…, (http://infokrisis.blogia.com/2005/041302-la-perspectiva-de-la-guerra-civil-racial-religiosa-y-social.php).
La banda neonazi NSU (Resistencia Nacionalsocialista) asesinó en Alemania a ocho personas de origen turco y a un griego, entre el 2000 y el 2006. La célula terrorista asumió en un vídeo de 15 minutos estos crímenes alardeando de los mismos, junto a otros crímenes de carácter xenófobo cuya autoría es un misterio.
El 22 de julio del 2.011, en Noruega, el fanático de extrema derecha Anders Behring Breivik, llevó a la práctica su plan para el comienzo de un estallido de guerra racial y religiosa, asesinando en sendos atentados el mismo día a 77 personas, y dejando más de un centenar de heridos, en el distrito gubernamental de Oslo y en la Isla de Utøya, ubicada en el lago Tyrifjorden.
En su declaración ante el Tribunal en día 17 de abril de 2012, Anders Behring Breivik, manifestó:
«Hoy estoy aquí como representante del Movimiento de Oposición Noruega y Europea contra el Comunismo y el Islam y de la Red de Caballeros Templarios y cuando habló, lo hago en nombre de muchos noruegos y europeos que no quieren ser privados de sus derechos étnicos, culturales y territoriales.
…
Yo y otros militantes nacionalistas estamos usando exactamente la misma lógica. Podemos por la fuerza de nuestro trabajo cambiar la política de inmigración, detener la desconstrucción y la colonización. Podemos obligarlos a cambiar de dirección, a ejecutar 70 personas o a destruir la ideología multicultural por otros medios, obviamente a contribuir a no perder nuestra etnia, nuestro cristianismo y nuestra cultura. Esto ayudará a evitar una futura guerra fratricida en Noruega, que podría desencadenar la muerte de cientos, quizás miles de noruegos.
Yo y otros militantes nacionalistas en Europa, estamos 100% seguros de que si podemos detener la experiencia multicultural en Europa a tiempo, vamos a ayudar a salvar a cientos de miles, quizás millones de vidas evitando así una gran guerra civil.
Y, por desgracia, no tenemos el lujo de esperar mucho más tiempo con la confrontación. Si tuviéramos que esperar 20, 30, 40, los noruegos étnicos y europeos serán una minoría. Por tanto, no podemos esperar más, como se mencionó anteriormente, las intenciones y motivaciones se basan en el bien y no el mal. Si hay alguien que es malvado son los izquierdistas y los multiculturalistas y otras personas que se dedican a la deconstrucción cultural y étnica sistemática.
El diario danés de mayor tirada, Jyllands-Posten convocó a 12 dibujantes daneses para caricaturizar a Mahoma, a pesar de estar prohibida la representación humana del profeta y de conocer previamente que dichas caricaturas dolerían a la comunidad musulmana. Las caricaturas, algunas de ellas con una clara vinculación del islam con el terrorismo, fueron publicadas el 30 de septiembre del 2005. Dicha actuación, que realiza como un acto de la libertad de prensa y el 20 de enero del 2.006, el periódico noruego, Magazinet, cercano al fundamentalismo cristiano, reproduce los dibujos en solidaridad con el Jyllands-Posten.
El semanario satírico francés de izquierdas Charlie Hebdo también reprodujo las caricaturas el 8 de febrero del 2.006, añadiendo algunas caricaturas nuevas, con una portada en la que Mahoma se echaba la mano a la cabeza y decía:
«Es duro ser amado por tontos»
La consecuencias de estos actos fue que el integrismo islamista y el yihadismo apareciera en los países de mayoría musulmana como los verdaderos preservadores del Islam, frente al laicismo occidental y a unos gobiernos locales que desde hacia tiempo carecían de credibilidad. Las caricaturas de Mahoma fortalecieron a ambos extremos, la de aquellos que persiguen el islam predicando un miedo irracional contra el mismo, y la de aquellos islamistas que lo deforman hasta el totalitarismo, desviándose de su verdadero credo.
Esta espiral de retroalimentación entre el islamismo irredento y la extrema derecha Europea y el fundamentalismo Cristiano Evangélico continuó desarrollándose en los años siguientes:
A pesar de que la Declaración sobre los Derechos de las Personas Pertenecientes a Minorías Nacionales o Étnicas, Religiosas y Lingüísticas, aprobada por la Asamblea General en su resolución 47/135 de 18 de diciembre de 1990, estable en su artículo 2.1 que las personas pertenecientes a minorías religiosas tendrán derecho a disfrutar de su propia cultura, a profesar y practicar su propia religión, y a utilizar su propio idioma, en privado y en público, libremente y sin injerencia ni discriminación de ningún tipo, se han producido, el diputado holandés Geert Wilders, líder del populista Partido para la Libertad (PVV), en agosto del 2.007, en el diario Volkskrant publicó el artículo titulado «Ya es suficiente: prohibid el Corán», en el que ente otras cosas decía:
«Estoy harto del Islam en Holanda, no más nuevos inmigrantes musulmanes. Estoy harto de las oraciones a Alá y a Mahoma en Holanda, no más nuevas mezquitas. Estoy harto del Corán en Holanda, prohibid ese libro fascista».
En mayo de 2009, la extrema derecha Europea Occidental, formada por el FPÖ austríaco, el VB belga, la LN y el FN francés se reunieron según la prensa en un congreso en Colonia (Alemania), para formar un frente anti-islámico.
El 1 de julio de 2009 Marwa El-Sherbini, farmacéutica egipcia, embarazada y madre de un niño pequeño, fue asesinada en una vista en un tribunal en Dresde, Alemania, por un hombre contra el cual había testificado por abuso verbal debido a que ella vestía un pañuelo islámico. Este crimen, que no fue el primero, es un claro exponente de hasta qué punto llegó la espiral de odio.
El 29 de noviembre de 2009, en Suiza se aprobó la propuesta de prohibición de construcción de minaretes en las mezquitas, fue aprobada por el 57,5% de los votantes.
La ministra de Justicia de Suiza, Eveline Widmer-Schlumpf, manifestó:
«El resultado del voto muestra un temor respecto al islam que debe ser analizado y tenido en cuenta”.
El Catedrático de Ciencia Política de la Universidad Juan Carlos, Don Fernando Reinares, manifestó al periódico “El País”, el 30 de noviembre del 2.009:
«Lo sucedido en Suiza ilustra el problema de la identidad colectiva en las sociedades multiculturales y es reflejo de la preocupación en esas sociedades por el acomodo del Islam a los valores y procedimientos democráticos en la medida en que los sectores salafistas van ganando terreno. Esta inquietud genera en muchas ocasiones hostilidad al extranjero y en este caso islamofobia, lo que debe hacernos reflexionar sobre si está funcionando o no la integración social de los musulmanes».
En 2010 el Pastor Evangélico Fundamentalista Terry Jones, publicó su libro, “El Islam es del diablo”, en el que afirmaba que el Islam promueve la violencia.
En julio del 2.010 Terry Jones, anunció que iba a quemar 200 coranes en el 2010, en el aniversario de los atentados del 11-s, a través de internet y youtube. Aunque el evento se canceló, Terry Jones no abandonó su idea y el 20 de marzo de 2011 llevó a cabo un «juicio del Corán» en su iglesia de Gainesville.
El 22 de abril de 2011, Terry Jones fue detenido, juzgado y encarcelado cuando tenía previsto dirigirse al Centro Islámico de América en Dearborn, Michigan, para protestar por la sharia.
El reconocido defensor de los Derechos Humanos Esteban Ibarra, en su artículo “Populismo Xenófobo y Racismo Criminal en Europa”, de 4 de septiembre del 2.012, publicaba los siguientes datos:
Las campañas xenófobas en Europa y el populismo ultranacionalista posibilitan resultados espectaculares en todos los países, en Suiza el Partido Popular alcanzaría el 29% del electorado, en Holanda, Wilders y su islamófobo Partido de la Libertad el 15,5%, en Hungría el Jobbik un 16,7% (en relación con una fuerza paramilitar que ataca y mata a gitanos). En Grecia, la ultraderecha entró en el Gobierno y el partido nazi “Aurora Dorada” crece de forma espectacular y los países nórdicos, referentes en cuanto a un estado de bienestar, verían como el Partido del Progreso Noruego alcanzaría el 23% de los votos, el partido extremista “Demócratas de Suecia” obtendría el 6%, la formación ultra “Verdaderos Finlandeses” un 19% y la extrema derecha danesa un 14%.
En el Informe especial Junio/2012 del Observatorio Andalusi, institución para la observación y seguimiento de la situación del ciudadano musulmán y la islamofobia en España, se recogía la siguiente cita:
El Consejo Islámico, que agrupa a 75 entidades de la Comunitat Valenciana y que representa al 60% de los 200.000 musulmanes que viven en territorio autonómico, subrayó ayer que estos momentos de crisis y convulsiones socioeconómicas, «también se difunden ofensas gratuitas a los sentimientos religiosos, en esta última ocasión hacia los musulmanes, haciendo públicamente escarnio de sus creencias, lo que hiere la sensibilidad de muchos».
El 26 de octubre 2.014, el colectivo «Hooligans contra salafistas» (Hogesa), que agrupa a hinchas y neonazis, organizó a través de facebook en Colonia una protesta que acabó con 44 heridos y enfrentamientos con la Policia. Posteriormente, el 15 de noviembre del 2.014, un total de 3.000 seguidores del colectivo «Hooligans contra salafistas», se manifestó, en lo que es otro claro ejemplo de cómo el extremismo yihadista alimenta la islamofobia y los grupos de extrema derecha.
La Declaración sobre la Eliminación de todas las Formas de Intolerancia y Discriminación Fundadas en la Religión o las Convicciones (Asamblea General de Naciones Unidas, 25 de noviembre de 1981), estableció en su artículo 2.1, que nadie será objeto de discriminación por motivos de religión, y en su artículo 3 establece que la discriminación por motivos de religión constituye una ofensa a la dignidad humana y una negación de los principios de la Carta de las Naciones Unidas.
La Sentencia del Tribunal Constitucional 214/1991, de 11 de noviembre, estableció:
“ni la libertad ideológica (art. 16 C.E.) ni la libertad de expresión (art. 20.1 C.E.) comprenden el derecho a efectuar manifestaciones, expresiones o campañas de carácter racista o xenófobo, puesto que, tal como dispone el art. 20.4, no existen derechos ilimitados …. El odio y el desprecio a todo un pueblo o a una etnia (a cualquier pueblo o a cualquier etnia) son incompatibles con el respeto a la dignidad humana, …”.
Para que la Sentencia del Tribunal Constitucional Español y la Constitución y demás tratados internacionales sobre libertad religiosa y derechos de las minorías se lleven a la práctica es necesario una labor de concienciación y sensibilización que aíslen a los grupos islamofobos, ya procedan de la extrema derecha o de sectores laicos, y los grupos radicales yihadistas que predican el odio. Ambos sectores antagónicos se retroalimentan y se necesitan en su lucha irracional por una sociedad monolítica, uniforme e intolerante.
Los actos terroristas en nombre de una supuesta yihad son el alimento de la islamofobia que recorre occidente, y ofrecen una imagen distorsionada del Islam, que muchas veces se ve ampliada por el desconocimiento del Islam por parte de muchos medios de comunicación, que dan carta de credibilidad a grupos extremistas que ofrecen una visión muy estrecha del islam.