Público/Danilo Albin. – El grupo ultraderechista se coordina a través de Telegram, donde cuenta con más de 700 miembros. «Las reglas son básicas: Nadie conoce a nadie pero todos nos conocemos. Somos francotiradores con mala leche pero buenas ‘praxis'», remarcan.
Los supremacistas blancos quieren activar sus redes propagandísticas en España. ‘Las vidas blancas importan’, el movimiento racista nacido en Estados Unidos, cuenta ya con más de 700 seguidores a este lado del Atlántico que se coordinan a través de Telegram y que en algo menos de cinco meses de funcionamiento han logrado desplegar su propaganda en más de 30 ciudades españolas.
«No nos vais a someter. En un mundo de corderos preferimos ser lobos. ¿A qué esperas para unirte a la rebelión?», dice uno de los mensajes publicados por el coordinador de este grupo, que se mantiene –al igual que sus compañeros– bajo el más estricto anonimato para evitar posibles problemas legales: la promoción del odio y del racismo aparece recogido en el artículo 510 del Código Penal.
El grupo se activó el pasado 26 de junio con un mensaje en el que se sentaban las reglas de funcionamiento. «Nadie conoce a nadie pero todos nos conocemos», «somos francotiradores con mala leche pero buenas praxis» y «somos el anti poder, pero jodemos al poder» aparecían como las tres premisas básicas.
Se autodefinen además como una «iniciativa pacífica y anónima en defensa de nuestra raza, apolítica, aconfesional y sustentada en la libertad de expresión». «Cualquier desviación a lo anterior no debe considerarse parte de esta iniciativa», señala
‘White Lives Matter Spain’ –su nombre oficial– se conforma de momento con encontrar voluntarios que impriman sus materiales con lemas racistas y los estampen en lugares estratégicos de sus respectivas ciudades. Las fotos de las acciones propagandísticas de estos «lobos» solitarios son enviadas por correo electrónico al responsable del grupo, que posteriormente se encarga de compartirlas con el resto de seguidores.
Los primeros voluntarios aparecieron el pasado verano en Málaga, Madrid, Granada, Murcia, León, Alicante y Albacete. Luego se sumarían activistas de otras ciudades como Pontevedra, Pamplona, Valencia o Jaén. Según ha podido verificar Público, el material racista ha aparecido en 34 ciudades de la península desde el pasado mes de julio.
Las distintas fotos publicadas por el responsable del grupo permiten conocer que a principios de agosto colocaron una pegatina racista encima del cartel de la sede local del PSOE en Orihuela (Alicante), mientras que en Pontevedra dejaron su huella muy cerca de la Delegación de Gobierno.
Esa práctica de colocar propaganda cerca de instituciones u organismos públicos ha sido la tónica habitual en distintas localidades. Por ejemplo, en La Cala de Mijas (Málaga) apareció una pegatina racista justo enfrente de la comisaría de la Policía Municipal.
«Mantente blanco»
En otro mensaje, los promotores de esta iniciativa animaban a a sumarse a este «proyecto nacional de acción en la calle». «Ama tu raza. Mantente blanco», «defenderemos a nuestras mujeres de las manos de los bárbaros» o «algún día se hará justicia para todos los blancos asesinados» son algunos de los lemas publicados en el grupo.
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Asimismo, el grupo cuenta con vínculos con canales de Telegram neonazis y no oculta su simpatía hacia Pedro Varela, el hitleriano español que estuvo encarcelado por la difusión de ideas genocidas y que hoy está nuevamente a la espera de juicio.
«Jóvenes revolucionarios»
En uno de los últimos mensajes explican que ‘White Lives Matter’ «nace en USA pero se extiende por todo el mundo para defender las vidas blancas y los planes de sustitución». Aquí cuentan con «jóvenes revolucionarios» –algunos «de edad» y otros «de espíritu», subrayan– que «empujan este proyecto y lo aúpan con ilusión a una realidad cada vez más asentada».
«Si te detienes en silencio y observas tal vez verás a uno de nosotros. No tenemos horarios, no esperamos reconocimiento, hacemos lo que tenemos que hacer», advertían en otro mensaje.
