TXEMA SANTANA. EL PAÍS.- El Gobierno de Canarias ha extinguido el contrato laboral de un profesor de religión por haber contraído matrimonio con otro hombre. Según la notificación de despido que el Ejecutivo regional ha hecho llegar al docente, su perfil ha dejado de ser idóneo para este puesto «en aplicación del derecho eclesiástico y canónico».
Luis Alberto González, el docente, recibió la carta en la que se le comunicaba esta decisión el pasado 1 de diciembre. La Consejería de Educación, dirigida por el socialista José Miguel Pérez, se ha encargado de extinguir el contrato con un escrito en el que se le explica que le ha sido revocada «la declaración de idoneidad eclesiática que se realizó con anterioridad al primer contrato de trabajo por la Diócesis de Canarias, en aplicación del derecho eclesiástico y canónico».
En verano el profesor despedido recibió la notificación del Obispado en la que le comunicaban que no podía seguir al frente del trabajo que realizaba por no ser “idóneo”. Entonces, Educación alegó que estaba estudiando el caso detenidamente para poder tomar una decisión, que ahora ya ha comunicado al afectado, que antes fue sacerdote.
González asegura que deja así “atrás” el “cerco ideológico y moral” de la institución eclesiástica que en su opinión “se empecina en no situarse a la altura de los tiempos ni a la altura del Evangelio”, al no estar “dispuesta a aceptar una relación o matrimonio homosexual, aunque pretendan sorprender con la acogida gay por compasión”. El educador, que lleva 16 cursos impartiendo clases, sostiene que la Iglesia aplica con la homosexualidad “aborrecer el pecado, pero acoger al pecador” y reta “a cualquier Obispo” a que le desdiga.
Tras mantenerse firme en la decisión de continuar hasta que le comunicaran el despido, ha logrado que se le aplique un despido en el que se reconocen sus derechos laborales adquiridos, como la indemnización y la prestación por desempleo.
Fuentes de Educación han citado la legislación vigente y la solicitud realizada por el Obispado de Canarias para llevar a cabo el despido del profesor por el hecho de estar casado con otro hombre.
En el Obispado mantienen silencio y se siguen remitiendo a las palabras de su comunicación al maestro despedido y al derecho canónico y eclesiástico, que determina la viabilidad de las personas que imparten la materia de religión en los colegios.
Luis Alberto González Delgado dejará de dar clases en el Instituto de Enseñanza Secundaria Las Salinas, así como en la Escuela de Artes Pancho Lasso, ubicados ambos centros educativos en Arrecife, capital de Lanzarote.