diariodehueva.es.- Las autoridades investigan las causas de los incendios que se están produciendo en Huelva y que tienen por objeto los enseres de personas sin hogar alojadas en soportales, bajos y pasillos de entre-calles.
Las autoridades policiales están investigando una serie de incendios que se están produciendo en Huelva capital desde hace meses y que están teniendo como objetivo los enseres y útiles que portan las personas sin hogar y que acumulan en algunos lugares donde luego pernoctan. En otras ocasiones, las bolsas que dejan, con sus mantas y ropa, son esparcidas por el suelo o arrojadas a charcos y contenedores.
Primero fue la fachada de la antigua sede de la estación de ferrocarril de Zafra la que salió ardiendo en agosto, en paralelo al fuego que acabó destrozando y arrasando la estación de tren de Sevilla, aledaña al antiguo colegio ferroviario en la Avenida de Italia. De ese incendio se llegó a decir, según algunos vecinos de la zona, que alguien prendió fuego sobre los objetos acumulados en la fachada y rápidamente se extendieron las llamas.
Luego, el asunto de los fuegos se extendió también a zonas de parques y rotondas, como el mini campamento ubicado en la rotonda de Punta Umbría.
Pero esta noche, el tema en cuestión, que no ha pasado desapercibido a varios colectivos sociales, ha dado un giro preocupante.
En plena madrugada se ha tenido que desalojar un edificio entero de la calle Filipinas en la barriada de las Adoratrices de Huelva, el que hay enfrente de un salón de juegos y encima del Mercadona. Lo ha adelantado esta mañana Onda Cero en su informativo local, que también ha colgado fotos de los hechos. Al parecer el colchón de una persona sin hogar salió ardiendo. No se sabe por qué motivo, si por accidente u otra causa.
Ahora las autoridades tratan de aclarar por qué están ardiendo los enseres de las personas sin hogar que se ven obligadas a ocupar bajos, calles y soportales para escapar de la humedad y el frío de la noche en las zonas de Pescadería, Zafra y otros barrios onubenses.
Desde la Policía Nacional aseguran que no hay interpuesta ninguna denuncia, algo lógico, al tratarse de personas transeúntes, sin hogar y en muchos casos sin papeles.
