Heraldo.- La víctima, de 34 años, salía de un concierto cuando recibió el impacto de una botella rota en el ojo derecho. La Policía habla de un ataque de corte ideológico y premeditado.
La Fiscalía intentará demostrar ante los magistrados de la Audiencia de Zaragoza que el violento ataque sufrido por un motero de 34 años a la salida de un concierto en La Casa del Loco al grito de «nazi» y «facha de mierda» no fue casual sino premeditado y tuvo un evidente componente ideológico. En cuanto a la autoría, las grabaciones de varias cámaras de seguridad y las declaraciones de algunos testigos le llevan a señalar como presuntos responsables a cinco jóvenes: tres varones y dos mujeres que vincula con movimientos de extrema izquierda y para los que acaba de solicitar condenas de 10 años de prisión, ya que la víctima sufrió un profundo corte en el ojo derecho que le ha dejado tuerto.
Los hechos que sentarán finalmente en el banquillo de los acusados a Lorena M. G., Alicia O. O., Javier B. G., Amado F. R. y Eduardo G. M. se produjeron sobre las 00.30 del 20 de octubre de 2019 a las puertas de la popular sala de conciertos de la calle Mayor de Zaragoza. Aquella noche, Sergio F. P. había acudido allí con varios amigos del grupo motero No Surrender para ver a la banda británica The Meteors. Ningún problema tuvieron con nadie en el local, pero a la salida se encontraron con una lluvia de insultos y botellas de cerveza rotas.
‘Pins’ con la bandera española
La Fiscalía está convencida de que los encausados acudieron «planificados» al lugar y una vez allí seleccionaron como objetivo a los moteros, a los que no conocían de nada, «exclusivamente por su simbología y estética». Porque el grupo vestía chalecos de cuero negro con insignias y parches con la bandera de España, y ello, mantiene la acusación pública, les hizo vincularlos con personas «de ideología de extrema derecha».
Las pesquisas, informes y registros que practicó tras el ataque la Policía Nacional permiten concluir a la Fiscalía que los cinco investigados tienen la misma afinidad ideológica, ya que se les intervinieron pegatinas y camisetas relacionados con la izquierda radical. Una bandera alusiva a los miembros de ETA y un adhesivo en el que se leía «Rodrigo Lanza -condenado por el crimen de los tirantes en Zaragoza- Libertad» fueron otros objetos hallados en sus domicilios.
